Confirmaron que asesinaron al hombre que había sido extorsionado por presos de una cárcel de Mendoza

En el marco de la investigación sobre la desaparición de Héctor Dionisio Aguilar, uno de los detenidos ha confesado que su pareja sería responsable de apuñalarlo para robarle su automóvil, desmantelarlo y ponerlo a la venta. 

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La confesión se produjo 20 días después de la desaparición de Aguilar, quien, originario de Córdoba, fue engañado para viajar a San Rafael por individuos que cumplían condena en la cárcel de Mendoza. En este contexto, se ha informado que la Justicia habría recuperado el arma homicida.

Aguilar, de 64 años, partió de su provincia en los primeros días de julio después de ser contactado por una persona a través de un perfil falso de Facebook. Según el abogado de la familia, Daniel Fernández, una mujer se comunicó con él por esta red social afirmando tener una hija fruto de una relación que habrían mantenido hace más de una década.

El letrado explicó: "A través de redes sociales lo conecta una persona, teóricamente una femenina que le pide una amistad por Facebook y -no sabemos cómo- le hace creer que es alguien con quien tuvo relaciones hace más de 10 años, y le comenta que en virtud de esa relación que había tenido con una persona (que no es esta, este es un perfil falso creado desde la cárcel) (...) le hace creer que tiene una niña de 10 años que la está pasando muy mal, por lo cual le solicitan ayuda, él le va girando dinero, de a 5 mil, 4 mil, 10 mil, hasta que en un momento le dicen que están en una situación de tal desamparo, que el hombre, de buena fe, decide ir a buscarlas y socorrerlas".

Impulsado por la supuesta necesidad de socorrer a su presunta pareja, Aguilar viajó a la localidad sureña con dinero en efectivo. Sin embargo, el 3 de julio perdió contacto con su familia, quienes informaron su desaparición. Cuando llegó a Cañada Seca, Aguilar fue abordado por dos individuos, Brían Ríos y su pareja Luffi. Según el abogado, ambos se subieron al automóvil "y de ahí en más, nada más se supo".

El domingo, durante un allanamiento que condujo al hallazgo del presunto arma homicida, la joven que había sido detenida junto a Ríos confesó el crimen. Luffi, acusada de encubrimiento agravado, declaró que su pareja apuñaló a Aguilar para robarle el vehículo y venderlo como autopartes. Supuestamente, este engaño fue tramado por un grupo de reclusos de la cárcel de San Rafael.

Medios locales reportaron que el sospechoso fue visto conduciendo el vehículo Gol Trend de la víctima días antes de su detención. El automóvil fue encontrado en un terreno perteneciente al club Cuadro Benegas, mientras otro hombre se preparaba para desmantelarlo. Además, en el Volkswagen se encontraron rastros de sangre y signos de violencia.

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Ríos es el principal sospechoso en la investigación por "homicidio criminis causa", antes denominada "averiguación de paradero". Según el fiscal a cargo del caso, Javier Garioli, el individuo había salido recientemente de prisión y, según Fernández, se encuentra bajo custodia policial en un hospital psiquiátrico después de un intento de suicidio el viernes pasado.

En relación al cuerpo de Aguilar, el abogado de la familia confirmó que aún no ha sido hallado y afirmó que las autoridades continúan la búsqueda. 

Una de las principales hipótesis sugiere que podría encontrarse en General Alvear, la última localidad donde se supo que la víctima tuvo conexión.