Boca está de luto: falleció uno de los goleadores históricos del club

El emblemático ex jugador tenía 75 años y brilló en el Xeneize. También tuvo un paso por River.

Este sábado, el fútbol argentino y en particular el Club Atlético Boca Juniors, se vistió de luto con la noticia del fallecimiento de Ernesto Enrique Mastrángelo, conocido como Heber, a los 75 años de edad. 

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El ex futbolista, que supo brillar en la década del 70 con los colores del club, dejó un legado imborrable en la institución y en la memoria de los hinchas.

Bicampeón de América en 1977 y 1978, y ganador de la Copa Intercontinental en 1977, Mastrángelo se convirtió en un referente indiscutible del equipo durante esa época dorada para el club. Además, formó parte del plantel que conquistó el título del Metropolitano en 1976 y el Nacional en 1976 y 1981.

Ernesto Enrique Mastrángelo se volvió una leyenda del club

En el mensaje de despedida publicado en las redes sociales del club, Boca Juniors expresó su profundo pesar por la partida del exjugador y lo recordó como un emblema que dejó una huella imborrable en la historia de la institución.

Nacido en Rufino, Santa Fe, el 5 de julio de 1948, Heber Mastrángelo se destacó como extremo y desarrolló una formidable delantera junto a otros talentosos jugadores de la época, como José "Toti" Veglio, Luis Darío Felman y Hugo Osmar Perotti.

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Con su estilo característico de diagonales al área, Mastrángelo dejó su sello en la camiseta Xeneize, anotando 56 goles en 134 compromisos, 47 de ellos en certámenes locales y 9 en competencias internacionales.

Además de su exitosa carrera como jugador, Mastrángelo incursionó en el mundo del entrenamiento, dirigiendo las inferiores de Boca desde 1996 hasta 2003. También tuvo experiencias como entrenador en Chacarita, así como en el fútbol de Costa Rica y Paraguay.

La partida de Heber Mastrángelo deja un vacío en el corazón de la familia boquense y en el fútbol argentino en general. Su legado como jugador y entrenador será recordado por siempre, y su nombre quedará grabado en la memoria de aquellos que tuvieron la fortuna de verlo brillar con la azul y oro. Descanse en paz, ídolo eterno de Boca Juniors.

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