La barra de un equipo argentino, a los tiros en la puerta de una escuela primaria

Los delincuentes le hicieron la "bienvenida" al nuevo jefe de la popular agrupación.

Disputándose el liderazgo de la barra brava de un club del ascenso argentino, dos facciones se enfrentaron a los tiros en la puerta de un colegio primario, en la localidad de Lomas de Zamora. 

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El 26 de febrero, Omar Plaini asumió la presidencia de Los Andes, llegando al club con un claro mandato de poner orden en una institución que estaba siendo dominada por la barra. Diez días después, los violentos le dieron la bienvenida con una balacera que se produjo en la puerta del colegio del club, donde se escucharon cerca de 15 disparos y no hubo muertos de casualidad.

La facción oficial de la barra, liderada por Walter Coronel, quien se encuentra en prisión por una causa vinculada al juego clandestino, y que además tiene una condena a tres años de prisión por violencia en el fútbol, fue la responsable del ataque. Coronel era el hombre fuerte del grupo Lomas de Zamora de La Doce, y él y su hermano Hernán fueron los dueños de la tribuna y muchas otras cosas en el club durante la presidencia de Víctor Grosi, titular saliente y también secretario general del gremio Sitraic de la construcción, donde hay denuncias constantes de violencia barrabrava.

El incidente se produjo cuando tres hombres de la barra oficial, incluido Hernán Coronel, hermano de Walter, divisaron en un auto en la esquina del colegio a Diego Fernando Callén, miembro de Chaco Chico. En ese momento lo abordaron, le robaron el celular, lo golpearon y cuando Callén logró subir al auto para escapar, le dispararon una ráfaga de tiros que por suerte no dieron en el blanco.

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El ataque se produjo en el momento en que los chicos de la escuela estaban saliendo por lo que se vivieron momentos dramáticos parecidos más a una escena de un western que a un escenario normal de una entidad educativa.

Omar Plaini, presidente de Los Andes, expresó su indignación y frustración ante el hecho, declarando que su compromiso es ordenar el club y que no se dejará intimidar por los violentos. Pidió la colaboración de la Policía y la Justicia para meter a estos vándalos presos. Con la ayuda de las autoridades, Plaini cree que podrá lograr su objetivo de ordenar el club en dos años. 

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