¿Hay personas inmunes al Covid-19?

Este es una de las tantas preguntas que inquietan a científicos e investigadores que trabajan día a día para encontrar una salida a la pandemia de coronavirus que afecta a toda la humanidad.

Desde que apareció el virus Sars Cov-2 a finales de 2019 y el mundo quedó bajo el efecto de una pandemia que ya se ha cobrado más de 1 millón de vidas y causado daños económicos y sociales que llevarán mucho tiempo revertir, una de las preguntas que la ciencia intenta responder es si era posible que una persona no se contagie de COVID-19. O sea, que sea inmune al virus

Al respecto el experto en salud pública y oncólogo, Elmer Huerta, afirma que aun no es posible saber si esto existe pero que es una de posibilidad. "No hay que olvidar que tomó varios años descubrir que el 1% de las personas descendientes de europeos del norte, especialmente suecos, son genéticamente inmunes a la infección por VIH. Estoy seguro de que con el tiempo descubriremos personas genéticamente resistentes a este nuevo coronavirus", explicó Huerta.

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Según los especialistas las personas con las infecciones más fuertes crean la respuesta inmune más fuerte. En esa línea los estudios sugieren cada vez más que la mayoría de las personas que contraen COVID-19 tienen síntomas leves o no presentan síntomas, es posible que tengan una respuesta inmune deficiente cuando el virus ingrese a su sistema. 

Incluso si se desarrolla inmunidad, no está claro cuánto tiempo duraría ya que el COVID-19 no ha existido el tiempo suficiente, aunque otro coronavirus, el resfriado común, tiene una inmunidad de corta duración. Mientras que los anticuerpos de coronavirus más graves, como el SARS o el MERS, se han detectado en sujetos años después de la infección.

Lo cierto es que la respuesta del cuerpo humano a una infección se desarrolla en dos partes. Primero, una respuesta inmune innata, que libera sustancias químicas y glóbulos blancos que luchan contra un virus y lo destruyen. El segundo es una respuesta inmune adaptativa que, junto con otros efectos, produce anticuerpos dirigidos que pueden adherirse a un virus y detenerlo. 

Si este último es lo suficientemente fuerte, puede crear una respuesta duradera a la infección que proporcionará protección futura al sujeto.

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