Repartirán cuentos en el Malvinas
Pero ahora en las canchas habrá posibilidad de tener “un cacho de cultura”, como decía el personaje Clemente.
Es que el Ministerio de Educación llevará adelante el programa “Pasión por leer” y repartirá libros en las canchas donde se jugará la Copa, entre ellas el estadio Malvinas Argentinas.
En total se va a repartir medio millón de cuentos de autores latinoamericanos, con la intención de que representen a cada uno de los países que participan en la competencia. Los ejemplares serán entregados durante el ingreso a los estadios.
El anuncio se hizo en el predio de la AFA en Ezeiza, donde además de los funcionarios estuvieron algunos de los jugadores de la selección. “El fútbol es un excelente vehículo para transmitirles a los chicos la pasión por la lectura. Queremos agradecer a los jugadores, al Checho (Batista), a Bilardo y a toda la gente de la AFA que se hayan sumado a esta iniciativa, que se agrega a las acciones que desde hace tiempo venimos realizando con la distribución de libros en las canchas de fútbol, como en otros lugares no convencionales, para promover la lectura”, dijo el ministro de Educación, Alberto Sileoni.
Los ejemplares serán entregados durante el ingreso a los estadios en las subsedes de Jujuy, Salta, Mendoza, San Juan, Santa Fe, Córdoba, La Plata y Buenos Aires. La intención es que el público pueda leer mientras espera el comienzo del partido.
En las escuelas también se repartirán libros. Será una recopilación de historias de la Copa América para que los chicos trabajen en las aulas.
La colección que se distribuirá en las canchas está integrada por libros de autores de distintos países de Latinoamérica. De Argentina: “Fóbal del grande”, de Ernesto Sabato; “Nunca jamás”, de Walter Saavedra, y “El Míster Peregrino Fernández”, de Osvaldo Soriano. De Brasil: “Abril, en Río, en 1970”, de Rubem Fonseca. Bolivia: “Dochera”, de Edmundo Paz Soldán. Uruguay: “Puntero izquierdo”, de Mario Benedetti. Perú: “Pasalacqua y la libertad”, de Alfredo Bryce Echenique. Paraguay: “El crack”, de Augusto Roa Bastos. México: “Última convocatoria”, de Juan Villoro. Colombia: “El juramento”, de Gabriel García Márquez y “¡Dele duro, monseñor!”, de Daniel Samper Pizano. Chile: “El travesaño” y “El partido del siglo”, de Reinaldo Marchant. Ecuador: “Segundo tiempo”, de Carlos Béjar Portilla y “Cuando me gustaba el fútbol”, de Raúl Pérez Torres. Venezuela: “El llanero solitario tiene la cabeza pelada como un cepillo de dientes”, de Francisco Massiani. Costa Rica: “Vuelo supremo” de Julián Marchena y “El guardapelo”, de Carlos Gagini.
Es que el Ministerio de Educación llevará adelante el programa “Pasión por leer” y repartirá libros en las canchas donde se jugará la Copa, entre ellas el estadio Malvinas Argentinas.
En total se va a repartir medio millón de cuentos de autores latinoamericanos, con la intención de que representen a cada uno de los países que participan en la competencia. Los ejemplares serán entregados durante el ingreso a los estadios.
El anuncio se hizo en el predio de la AFA en Ezeiza, donde además de los funcionarios estuvieron algunos de los jugadores de la selección. “El fútbol es un excelente vehículo para transmitirles a los chicos la pasión por la lectura. Queremos agradecer a los jugadores, al Checho (Batista), a Bilardo y a toda la gente de la AFA que se hayan sumado a esta iniciativa, que se agrega a las acciones que desde hace tiempo venimos realizando con la distribución de libros en las canchas de fútbol, como en otros lugares no convencionales, para promover la lectura”, dijo el ministro de Educación, Alberto Sileoni.
Los ejemplares serán entregados durante el ingreso a los estadios en las subsedes de Jujuy, Salta, Mendoza, San Juan, Santa Fe, Córdoba, La Plata y Buenos Aires. La intención es que el público pueda leer mientras espera el comienzo del partido.
En las escuelas también se repartirán libros. Será una recopilación de historias de la Copa América para que los chicos trabajen en las aulas.
La colección que se distribuirá en las canchas está integrada por libros de autores de distintos países de Latinoamérica. De Argentina: “Fóbal del grande”, de Ernesto Sabato; “Nunca jamás”, de Walter Saavedra, y “El Míster Peregrino Fernández”, de Osvaldo Soriano. De Brasil: “Abril, en Río, en 1970”, de Rubem Fonseca. Bolivia: “Dochera”, de Edmundo Paz Soldán. Uruguay: “Puntero izquierdo”, de Mario Benedetti. Perú: “Pasalacqua y la libertad”, de Alfredo Bryce Echenique. Paraguay: “El crack”, de Augusto Roa Bastos. México: “Última convocatoria”, de Juan Villoro. Colombia: “El juramento”, de Gabriel García Márquez y “¡Dele duro, monseñor!”, de Daniel Samper Pizano. Chile: “El travesaño” y “El partido del siglo”, de Reinaldo Marchant. Ecuador: “Segundo tiempo”, de Carlos Béjar Portilla y “Cuando me gustaba el fútbol”, de Raúl Pérez Torres. Venezuela: “El llanero solitario tiene la cabeza pelada como un cepillo de dientes”, de Francisco Massiani. Costa Rica: “Vuelo supremo” de Julián Marchena y “El guardapelo”, de Carlos Gagini.
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