La peligrosa y desconocida enfermedad que puede provocar abortos y muerte prematura

Identificada con las siglas SAF, la patología fue identificada hace menos de 40 años.

La enfermedad denominada "joven" por los médicos, lleva el nombre síndrome de anticuerpos antifosfolípidos (SAF).

Corría el año 1983, cuando el reumatólogo británico Graham Hughes la detectó, luego de haber hallado tres anticuerpos "antifosfolípidos".

Estos anticuerpos se unen al endotelio, y además estimulan las plaquetas y forman un trombo. El especialista inglés los detectó en sus pacientes con lupus, una enfermedad en la que el sistema inmunológico no reconoce como propios los tejidos del cuerpo y provoca una respuesta que deteriora los órganos. El lupus afecta por lo general a las mujeres y, 2 de cada 10 pacientes con lupus desarrollan el SAF, aunque no son los únicos casos.

"El SAF es una condición autoinmune que predispone a trombosis arteriales y venosas sobre todo en personas jóvenes. Es causa frecuente de abortos a repetición en el primer trimestre y de muerte fetal, también está asociada al retardo del crecimiento intrauterino y a la preeclampsia", dijo a Clarín, Paula Alba, titular de la Asociación de Reumatología de Córdoba.

En muchas mujeres se diagnóstica tras descartar causas ginecológicas luego de varios abortos. En muchos otros casos, mujeres y hombres, el diagnóstico se conoce tras una patología cardíaca severa.

"El SAF puede llevar a mortalidad y morbilidad prematura", agregó Alba, también docente de la Universidad Nacional de Córdoba y jefa del Servicio de Reumatología del Hospital Córdoba y del Hospital Materno Neonatal de esa provincia. La especialista remarcó que sus más destacadas manifestaciones clínicas son la trombosis y también sus afecciones posibles como el infarto de miocardio o el ACV isquémico.

Tal es la relevancia y el impacto de esta enfermedad que esta semana Argentina es la sede del 17° Congreso Internacional de Anticuerpos Antifosfolípidos ICAPA 2022, que se realiza por estas horas en la Universidad Nacional de Córdoba, en el marco del IX Simposio de Otoño de Reumatología, organizado en forma mancomunada con la Sociedad Argentina de Reumatología (SAR). También se realizará una reunión para pacientes con SAF, gratuita con inscripción previa.

Una enfermedad casi desconocida

El conocimiento de las personas sobre el SAF es muy escaso. Inclusive, la comunidad científica tiene todavía muchas dudas al respecto. No hay cifras de prevalencia en Argentina, pero la SAR está confeccionando un registro nacional de pacientes en el que ya se anotaron a 400, para analizar las características clínicas y los patrones de tratamiento.

Otro dato para nada menor, es que "las cifras globales refieren que entre un 1% y un 5% de la población general puede tener estos anticuerpos... pero eso no significa que todos vayan a tener la enfermedad", aclaró el también reumatólogo Guillermo Pons-Estel, presidente junto con Alba del ICAPA 2022. El especialista, director de la Unidad de Investigación de la Sociedad Argentina de Reumatología, desglosó números.

Según distintas investigaciones, se conoció que los SAF están presentes, en la población general, en el 10% de los casos de trombosis venosa profunda, el 11% de los infartos de miocardio y el 14% de los ACV. En las pérdidas de embarazos frecuentes ronda entre el 10% y el 29% y en la preeclampsia en hasta un 30%. Sobre los pacientes con lupus, Alba añadió que el 40% poseen anticuerpos SAF, y que entre un 20% y un 30% tiene la enfermedad.

Cómo se detecta el SAF

¿Por qué hay pacientes que desarrollan este síndrome y otros no? Es una de esas preguntas a las que los científicos le buscan respuesta, como en muchas otras enfermedades autoinmunes.

Pons-Estel, explicó que existe "un factor gatillo. Estrés, infecciones, tratamientos, factores como el sol o la microbiota, el estrés oxidativo a nivel celular... no se sabe por qué en quienes tienen esta predisposición genética, se desencadena", y además recomendó pesquisar el SAF en los casos de abortos recurrentes con causa ginecológica descartada, y también en las personas menores de 60 años con eventos cardiovasculares.

El galeno también se refirió a las acciones de prevención primaria, con la que podrían detectarse estos anticuerpos previamente.

"No está indicado pedir pruebas de estos anticuerpos en personas sanas. Porque estos anticuerpos tienen variaciones en el tiempo, a veces aparecen y luego bajan. Esas oscilaciones es parte de lo que estamos estudiando".

Pero hay un dato esperanzador. Primero, que en el caso de que se encuentre el síndrome existen tratamientos de antiagregación plaquetaria con aspirina o con anticoagulantes. Y además, que no sólo puede detectarse si un paciente está infartado en un shock-room o si perdió un embarazo.

Pons-Estel enumeró algunas manifestaciones clínicas a las que es importante prestarle atención, tales como las cefaleas frecuentes (que pueden vincularse bajas plaquetas); el livedo reticularis (un trastorno vascular que se caracteriza por decoloración de la piel con manchas púrpuras), el síndrome de Raynaud (que causa sensación de adormecimiento y frío en manos y pies) y los dolores articulares.

Es importante destacar que las consultas las realizan los reumatólogos y también los hematólogos y cardiólogos.

En los pacientes con SAF, como para todos en general, hay una indicación importante, y tiene que ver con el control de los factores de riesgo cardiovascular.

Los profesionales de la salud, recomiendan llevar una vida saludable, practicar ejercicio, cumplir con una dieta sana, no fumar, y realizarse chequeos periódicos de presión arterial y colesterol.

Esta nota habla de: