Delivery fue a entregar un sándwich, trabó el timbre y el dueño le metió un balazo
Nadie hasta hoy podría haber pensado que trabajar de Delivery podría ser una profesión de riesgo, claro más allá de lo que implica lidiar con el tránsito durante buena parte del día.
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Lo cierto es que para un pibe de 17 años, repartidor y oriundo de Salta, su trabajo se volvió su peor pesadilla de un día para el otro.
El hecho ocurrió en la noche este miércoles, en el barrio Bancario de la provincia norteña, cuando el joven que trabaja realizando Delivery de comidas, se dirigió a un domicilio particular para entregar un sándwich, aparentemente de milanesa.
Lo cierto es que al llegar, el chico tocó el timbre y el botón del llamador sufrió un desperfecto por lo que se quedó pegado y comenzó a sonar de forma permanente.
Ante la ensordecedora situación, un hombre de 75 años salió de la casa visiblemente ofuscado y sin mediar palabra le disparó en la pierna derecha, según informaron medios de esa provincia.
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Fuentes policiales confirmaron que el hombre al parecer no sabía que su hija había pedido un sándwich por lo que interpretó la situación como un "supuesto ataque" a su propiedad.
El joven, por suerte, se encuentra fuera de peligro y el hombre ya identificado por la policía atravesará un proceso judicial en su contra.
