No hay remate: ladrón sanjuanino robó un celular y se escondió en la Escuela de Policía

El sujeto salió corriendo luego de cometer el ilícito y se metió en la boca del lobo. Obvio, quedó detenido.

Una situación totalmente absurda se dio en la provincia de San Juan, donde un sujeto robó un celular pero buscó refugió en el lugar menos indicado. Como no podía ser de otra manera, quedó detenido.

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El hecho se dio esté miércoles y ningún testigo de lo que había pasado podía creer cómo se había dado la situación. El caso policial tiene tintes de incredulidad, pero también de humor.

Todo ocurrió alrededor de las 13 del mediodía en pleno centro de Rivadavia, en San Juan. Allí, en calles Benavides y Pellegrini un hombre robó un celular momento antes de bajarse de un colectivo de la línea 70 (empresa La Marina) y minutos después fue detenido, pero en el lugar menos pensado.

En su intento de huida comenzó a correr y eligió el sitio menos indicado para esconderse. Tras correr durante algunas cuadras, se metió en el interior de la Escuela de Policía de San Juan.

Al ingresar allí, entendió dónde estaba y quiso cambiar el rumbo de su escape, pero los cadetes de la policía observaron la actitud extremadamente sospechosa del sujeto, que quiso escabullirse pero falló en el intento y fue aprehendido.

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Los aprendices dieron aviso a la Comisaría 30 y el hombre quedó a disposición de la Justicia. La víctima del robo había sido un chico de 25 años, quien horas más tarde recuperó su celular en buen estado.

El inexperto ladrón quedó imputado por robo simple en grado de tentativa por la Unidad Fiscal 4 de San Juan.

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