Tristeza por la muerte de un querido referente de la arquitectura de Mendoza

Miguel Ángel Guisasola dejó un importante legado en la arquitectura de la provincia. Murió a la edad de 79 años.

Fue un experimentado y reconocido profesional que hizo gran parte de su carrera en tierras mendocinas y que falleció este miércoles a la edad de 79 años. 

Las escuelas, donde al diseño arquitectónico se le sumó la variable del eficiente manejo energético, fueron quizás sus trabajos más representativos.

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Nació en la localidad de Vicente López el 20 de diciembre de 1942 y du padre fue uno de los fundadores de la fábrica de Sidra Tunuyán de Guisasola Hnos.

Fue un personaje muy querido en el ámbito de la arquitectura y patrimonio cultural y por eso amigos y personas cercanas a la familia Guisasola, compartieron sentidos mensajes en sus redes sociales. Uno de ellos fue del es director de Patromonio Cultural de Mendoza, Marcelo Nardechia. 

En una biografía realizada por Graciela Moretti para el libro "Arquitectos en Mendoza", se destaca que Guisasola integró el equipo inicial y fundador del Grupo 10, prestigioso estudio de profesionales que actuó en Mendoza entre 1971 y 1991.

A lo largo de dos décadas la producción del estudio fue vasta, participando en concursos, proyectando obras para instituciones y desarrollando conjuntos de viviendas agrupadas en barrios residenciales. En 1983, cuatro de los miembros iniciales del estudio: los arquitectos Carminati, Ceruti, Guisasola y Lemos, fueron presentados en la revista Summa como integrantes de la "generación intermedia" de profesionales argentinos.

Los números 193 y 226 de esa revista publicaron varios de sus trabajos: entre ellos el edificio BUCI, su propio estudio de arquitectura, dos conjuntos de viviendas construidas en la 5ª Sección y el proyecto de la sede social del Club de Campo Mendoza; la sede de la Alianza Francesa y el edificio Horcones ubicado en el centro de esquí Penitentes

Al disolverse el Estudio profesional, conformó una nueva sociedad en 1992, esta vez junto a la diseñadora industrial Amalia Roca de Guisasola. 

Además de su labor como arquitecto independiente, Guisasola inició, a finales de la década del setenta, una carrera profesional dentro del Estado provincial.

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