The Lancet: la publicación científica que borra la grieta en la política argentina

Primero desactivó las críticas que se habían planteado sobre la eficacia de la vacuna Sputnik V y ahora revela datos importantes sobre el riesgo que representa mantener las escuelas abiertas.

The Lancet, la prestigiosa publicación científica que eliminó las dudas sobre la vacuna Rusa Sputnik V al afirmar que la misma tenía una eficacia del 91,6% contra COVID-19, ahora publicó un nuevo estudio en el que sostiene que "La reapertura de la escuela sin una sólida mitigación del COVID-19 corre el riesgo de acelerar la pandemia". 

El artículo se da a conocer justo cuando en el país se discute fuertemente sobre este tema y en medio de uno de los momentos de mayor tensión entre el oficialismo y un sector mayoritario de la oposición representada por la alianza Juntos por el Cambio. 

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Entre los principales puntos que remarca el artículo,  The Lancet destaca que "Los argumentos de que las escuelas no contribuyen a la transmisión comunitaria y que el riesgo general para los niños de contraer COVID-19 es muy pequeño han significado que las mitigaciones en las escuelas hayan recibido poca prioridad. Sin embargo, la evidencia citada para estos argumentos tiene serias limitaciones". 

En ese sentido explica que "Los cierres de escuelas primarias y secundarias se han asociado con reducciones sustanciales a lo largo del tiempo en el número de contagios en muchos países (incluida Inglaterra)".  Además que hay datos que sugieren que "la apertura de todas las escuelas sin medidas de mitigación sólidas en su lugar probablemente conducirá a que Rt (tasa de transmisión) supere 1 en casi todos los escenarios". 

Respecto a cómo el virus afecta a los niños y jóvenes remarca que "Aunque es poco probable que el COVID-19 cause una enfermedad grave en los niños, las estimaciones de la prevalencia de los síntomas prolongados del COVID basadas en la Encuesta de Infección de la ONS sugieren que el 13% de los niños de 2 a 10 años y el 15% de los de 12 a 16 años tienen al menos al menos un síntoma persistente 5 semanas después de dar positivo".  

Y agrega que "Dada la incertidumbre sobre los efectos a largo plazo en la salud de la infección por SARS-CoV-2, no sería prudente dejar que el virus circule en los niños, con el consiguiente riesgo para sus familias".

Sobre el final concluye que "Reabrir plenamente en un entorno de alta transmisión comunitaria, sin las salvaguardas adecuadas, se corre el riesgo de privar a muchos niños de la educación y la interacción social nuevamente, agravando las desigualdades existentes. Al contribuir a una alta transmisión comunitaria, también proporciona un terreno fértil para la evolución del virus y nuevas variantes.

Este es el artículo original (en Inglés)

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