Un mendocino brilló en La Voz Argentina y conmovió a Lali Espósito con su historia desde España

Las audiciones a ciegas de La Voz Argentina continúan dejando momentos memorables, y este domingo fue el turno de Ambrosio Cantú, un joven talento oriundo de Mendoza, que sorprendió a todos con su versión acústica del clásico "Mamma Mia" de ABBA.

Acompañado únicamente por su guitarra, Ambrosio logró lo que pocos: que los cuatro coaches giraran sus sillas para intentar sumarlo a sus equipos. Sin embargo, fue Lali Espósito quien finalmente se quedó con el joven cantante, en un emotivo momento cargado de anécdotas y conexión previa.

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Durante su presentación, Lali y Luck Ra fueron los primeros en girar sus sillas, seguidos por el dúo Miranda! y finalmente Soledad Pastorutti. Tras finalizar su interpretación, Ambrosio compartió su historia: contó que vivió en España, donde se dedicaba a cantar en las calles de Valencia, y que incluso participó en la versión local del programa Got Talent.

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https://www.instagram.com/ambrosiocantu/

Pero la mayor sorpresa llegó cuando reveló que ya había tenido contacto con Lali en el pasado. "Vos Lali me mandaste un saludo cuando actué allá en España", confesó Ambrosio, provocando una reacción inmediata de la cantante, quien recordó el mensaje con una sonrisa: "¡Sí, es verdad! Nos representabas allá... sos vos!".

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Mientras Luck Ra y La Sole bromeaban sobre el "vínculo especial" entre Lali y el participante, la artista pop no dudó en apelar a la emoción para convencerlo: "Ambrosio, vos y yo sabemos lo que sentimos el uno por el otro... Nadie te va a entender como yo", le dijo con vehemencia. "Te mandé el mensaje para darte fuerza, y la fuerza te trajo hasta La Voz Argentina para que esto suceda. ¡Ambrosio, te lo pido por Dios!", exclamó entre risas y emoción.

Finalmente, y casi como una escena escrita por el destino, Ambrosio confirmó lo que ya parecía claro: "Voy a seguir mi corazón y lo que he venido a buscar estando acá. Así que me voy a ir con Lali".

El emocionante momento no solo dejó a los coaches y al público cautivados, sino que también dejó entrever una de las claves del programa: las historias personales y los vínculos auténticos también pueden marcar la diferencia en el escenario.