La severa denuncia de un participante de Gran Hermano contra Santiago del Moro

Durante la última gala de eliminación de Gran Hermano, se desató un inesperado enfrentamiento entre el participante Lisandro y el conductor del programa, Santiago del Moro. La tensión comenzó cuando el Del Moro solicitó hablar en privado con el participante antes de anunciar la primera salvación de la noche.

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Ante la incertidumbre generada por estas palabras, Lisandro expresó su malestar al no comprender la naturaleza de la conversación privada que le esperaba. 

Una vez que Del Moro reveló que Lisandro era el primer salvado, en lugar de celebrar, el participante manifestó su incomodidad y solicitó aclaraciones al conductor.

Del Moro, en un intento por tranquilizar a Lisandro, lo dirigió al confesionario para abordar una situación de "público conocimiento". Allí, ante la audiencia, se develó que la preocupación de Del Moro estaba centrada en la situación sentimental de Lisandro, quien durante el proceso de casting declaró estar soltero y dispuesto a todo.

En un emotivo encuentro en vivo, Lisandro admitió que su declaración en el casting fue consecuencia de no conocer aún a Milagros, su novia, y expresó sentirse culpable por no haberle comunicado su participación en el programa.

Asimismo, argumentó que se debatía entre perseguir su sueño o priorizar su relación amorosa. "Yo no lo dije después porque pensé que me iban a elegir si era soltero y no si estaba de novio. Estaba entre decidirme por mi sueño o por el amor", explicó Licha.

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La situación evidenció un conflicto emocional en Lisandro, quien se vio desestabilizado por la revelación pública de su relación sentimental y la disyuntiva entre sus aspiraciones personales y su compromiso amoroso.