Salud: más de un millón de mendocinos sin servicio

Esta situación se debe al paro de los gremios de la salud; Afecta a quienes no tienen obra social o son afiliados a Osep; Niños y ancianos son los más perjudicados.



Por Horacio Yacante

Seis de cada diez mendocinos y mendocinas están sin servicio
pleno de salud. Y seguirán sin poder ser atendidos en hospitales públicos y
centros de salud de Mendoza, debido al paro que llevan adelanta AMPROS y ATE,
los principales gremios del sector de la Salud. La paralización de las
actividades afecta a más de 660 mil personas sin cobertura médica y a los 370
mil afiliados de OSEP, es decir más de un millón de mendocinos.



La falta de un acuerdo salarial entre el Estado y los
trabajadores, ha reducido al mínimo las guardias hospitalarias y en aquellos
centros de atención primaria donde normalmente no hay guardias, permanecen
completamente cerrados.



El represente de ATE, Roberto Macho, indicó que el
acatamiento de personal en salud alcanzó alrededor del 90 por ciento, mientras
que en el sector es apenas inferior con el 80 por ciento de las voluntades.
Desde el ministerio dirigido por Matías Roby no se arriesgaron a confirmar
estas cifras.



Ánimos en contra



El dirigente gremial ya había adelantado su descreimiento de
una oferta de parte del Ministerio de Hacienda y adelantó la instalación de una
carpa con trabajadores frente a la Legislatura, y la realización de una
protesta en ese mismo lugar durante el jueves 1 de mayo, día en que Francisco
Pérez pronuncie su tercer discurso como gobernador en el inicio de otro año
legislativo.



A esto se suman los fuertes descuentos realizados en los
haberes de abril, que en vez de disuadir a los trabajadores de continuar con la
huelga, ha tenido el efecto contrario y enardeció los ánimos.



Al respecto, Macho explicó que esta medida “completamente
impopular” de parte del Gobierno “no hizo sino sumar más adhesiones a la
causa”. Razón por la que se estima como poco probable que la situación se
resuelva dentro de esta semana.



Mientras tanto, los hospitales y centros de atención
primaria continuarán en estado de asamblea permanente hasta que el Gobierno
efectúe una oferta lo más cercana posible al incremento del 45 por ciento
requerido por ambos gremios.



Niños y ancianos, los
más afectados



Casi la mitad de los pacientes pediátricos de la provincia
se ha visto perjudicados por esta medida de fuerza. Se trata de alrededor de
200 mil niñas y niños sin ningún tipo de cobertura médica y que dependen
completamente de la atención de los efectores públicos.



Otro sector vulnerable afectado son las mujeres mayores de
60 años y los hombres mayores de 65 que no cuentan con cobertura social de
ningún tipo. Entre ambos sexos componen un total de 15 mil personas que no
pueden acceder a las consultas con sus médicos de cabecera, requisito
indispensable para recibir las prescripciones de las medicinas que necesitan
ingerir diariamente.