"No hay lugar al error": la marca en la cara de Fernando que complica a uno de los rugbiers

Se trata de la suela de una zapatilla. Esta martes, declaró la perito de la policía científica que fotografió el cadáver de Báez Sosa y apuntó a uno de los rugbiers.

Este marte se llevó a cabo una nueva jornada del juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa. En esta oportunidad, quien declaró y aportó nuevas pruebas al caso fue el perito de la Policía Científica María Eugenia Cariac.

Los aberrantes mensajes privados de los rugbiers minutos después del crimen de Fernando Báez Sosa

Cariac, fue al responsable de fotografiar el cadáver de Fernando Báez Sosa y aseguró haber analizado la marca de la zapatilla que tenía la víctima en su rostro y por la cual los rugbiers habían inculpado a Pablo Ventura.

Según la perito, Fernando Báez Sosa, tenía una marca de al menos 6 centímetros por 2 en la parte izquierda del mentón, producto de una patada, y la lesión era compatible con la zapatilla que usaba Máximo Thomsen, según explicó al declarar en el juicio por el crimen, la perito que tomó fotografías del rostro de la víctima durante la autopsia para realizar la comparación con los calzados de los imputados.

Cariac, aseguró ante el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de la ciudad bonaerense de Dolores que Báez Sosa presentaba además otra huella similar pero de menores dimensiones en la parte izquierda del cuello, sin poder determinar si correspondía al mismo golpe y calzado.

La perito indicó que se estableció "una correspondencia" entre la lesión en el rostro y la zapatilla marca Cyclone "con diseño en zigzag", que usaba Thomsen al momento del ataque, aunque sugería "una prueba más profunda" para para "corroborar si había correspondencia de diseño".

"Nunca vi nada semejante": declaró conmovido el forense del caso Fernando Báez Sosa

En ese sentido, declaró a continuación Haydeé Almirón, jefa del Laboratorio Científico de la Policía Federal en Mar del Plata, quien confirmó que de acuerdo a otra pericia comparativa scopométrica realizada a fines de mayo de 2020, se determinó que "la plantilla que pertenece al ciudadano Máximo Thomsen se corresponde a la huella en el maxilar inferior izquierdo".

Ante una pregunta en ese sentido del defensor, Hugo Tomei, Almirón dijo que "no hay posibilidad de error", y luego agregó que "la secuencia de zigzag" que presentaba la impronta en el rostro "no era posible que fuera de otra zapatilla".

Esta nota habla de: