Milei en La Rural: "El país estaba al borde de la hiperinflación"
En un discurso marcado por el tono económico y político, Javier Milei se presentó en La Rural para la inauguración de la Feria Internacional de Turismo y recordó la situación que enfrentó al asumir la presidencia en diciembre de 2023. "Encontramos un paciente en estado crítico", señaló, aludiendo al contexto heredado, y agregó: "El país se encontraba al borde de una nueva hiperinflación con indicadores sociales incluso peores que los de 2001".
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El mandatario destacó que, en apenas seis meses, se logró un ajuste de "cinco puntos del PIB del déficit fiscal a nivel Tesoro Nacional y otros 10 puntos en el Banco Central", lo que permitió alcanzar superávit. "Argentina es uno de apenas cinco países en el mundo que tienen superávit fiscal sin estar en default. Algo que además no se vio en nuestro país durante los últimos 125 años de historia", remarcó.
En ese marco, Milei apuntó contra la política tradicional, a la que definió como "la casta". "Los políticos viven de medidas efectistas que más temprano que tarde derrumban todo lo construido. Nosotros vinimos a hacer algo distinto: sentar las bases del crecimiento a largo plazo", afirmó.
La Feria Internacional de Turismo de América Latina (FIT), realizada en el predio de La Rural, fue el escenario elegido por el Presidente para hablar del potencial del sector. "El turismo argentino tiene todas las condiciones para ser punta de lanza global", aseguró. Destacó destinos "envidiados por cualquier país", la "diversidad gastronómica reconocida mundialmente" y el "capital humano de primer nivel". Según su visión, con esas ventajas, el país podría tener un turismo "20 veces más grande que el actual".
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Sin embargo, Milei advirtió que para alcanzar ese objetivo se necesita previsibilidad. "Se requiere estabilidad macroeconómica porque estas necesidades implican inversión y trabajo. Y para eso necesitamos la estabilidad suficiente para proyectar inversiones a 10, 20 o 30 años sin el temor a que la economía vuele por los aires", explicó.
También planteó reformas estructurales, como una modificación del mercado laboral, una reforma fiscal que reduzca impuestos y medidas para terminar con "el flagelo de la industria del juicio".
Sobre las propuestas opositoras, fue tajante: "Tenemos claro que la solución no es volver al catastrófico sendero de las devaluaciones recurrentes, ni inflar artificialmente la demanda emitiendo pesos a mansalva, ni imponer regulaciones que fuercen a la gente a vacacionar en el país".
Para cerrar, reafirmó su línea de gestión: "Estamos constantemente repitiendo que el orden fiscal no se negocia, que la inflación hay que pulverizarla o que los impuestos y las regulaciones deben ser menos. No es un capricho nuestro, es la disciplina que nos llevará a ser un país rico y próspero".
