El Gobierno planea otro recorte en luz y gas: cuál es el insólito grupo de personas que afectará

El ejecutivo eligió un particular requisito para aumentar las taridas de los diferentes servicios.

El gobierno de Javier Milei plantea una nueva medida para reducir los gastos públicos mediante una propuesta de quita de subsidios para la electricidad y el gas dirigida a un selecto grupo: propietarios de vehículos con menos de cinco años de antigüedad. Hasta el momento, esta exclusión aplicaba solo a vehículos con menos de tres años de antigüedad.

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Los documentos publicados por la Secretaría de Energía revelan esta nueva iniciativa, que se presentará en las audiencias públicas del 29 de febrero como parte de la discusión sobre la segmentación de tarifas y subsidios. La propuesta busca establecer una nueva "Canasta Básica Energética" para mejorar la eficiencia y focalización de la ayuda estatal a los hogares.

La segmentación actual, implementada en agosto de 2022, excluía a las personas con tres o más vehículos automotores de menos de cinco años de antigüedad de recibir subsidios, clasificándolas como "Nivel 1" (ingresos altos) en sus hogares. 

Además, otros criterios patrimoniales, como la propiedad de aeronaves o embarcaciones, podrían implicar la eliminación de las subvenciones estatales.

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El gobierno planea cruzar múltiples bases de datos para validar la información proporcionada por los solicitantes de subsidios, incluyendo datos sobre ingresos, propiedad de vehículos, bienes inmuebles, entre otros. Esta tarea plantea desafíos debido a la alta informalidad laboral en el país y a posibles incentivos para la subdeclaración de ingresos y patrimonios.

La nueva "Canasta Básica Energética" se espera que esté definida en abril y entre en vigencia en mayo, según el Fondo Monetario Internacional. Se estima que los subsidios a la energía disminuirán este año entre 2500 y 3000 millones de dólares, representando el 1,6% del Producto Interno Bruto (PIB).

Esta medida se apoya en factores como la reducción de importaciones de energía gracias al gasoducto de Vaca Muerta, la caída de precios internacionales del gas y la generación eléctrica local debido a las lluvias. A nivel nacional, se estima que el 67% de los usuarios de la red eléctrica reciben ayuda estatal para pagar los precios mayoristas de la energía eléctrica.

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