“No quisimos matarlo”, dijo uno de los rugbiers detenidos por el crimen

La mujer, de 36 años, se encuentra a disposición de la Justicia por apuñalar a su pareja. El hecho ocurrió en Luján. Intentan determinar si se trató de un caso de legítima defensa.


Uno de los ocho
rugbiers detenidos por el homicidio de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell
aseguró que no quisieron matar al joven, al decir unas palabras en la audiencia
realizada ante el juez de Garantías de la causa, quien este viernes dará a
conocer su resolución sobre el pedido de prisión preventiva formulado por la
fiscal, informaron fuentes de la causa.





“No quisimos
matarlo”, dijo Blas Cinalli (18), mientras a su lado lloraba Máximo Thomsen
(20), uno de los acusados como coautor del crimen, detallaron a Télam voceros
judiciales que participaron de la audiencia encabezada por el magistrado David
Mancinelli.





Las fuentes
aclararon que esos dichos no cuentan como declaración formal en la causa y
recordaron que en la indagatoria ante la fiscal de Villa Gesell, Verónica
Zamboni, los diez rugbiers imputados se negaron a declarar respecto de lo
ocurrido el 18 de enero último en la puerta del boliche Le Brique, donde
mataron a golpes a Báez Sosa (18).





Al término de la
audiencia, Fabián Améndola, uno de los abogados de la familia Báez Sosa, contó
que el juez adelantó que dará a conocer su resolución este viernes.





En tanto, la
defensa de los rugbiers, a cargo de Hugo Tomei, dijo que pedirá que en caso de
confirmarse la prisión preventiva para todos o algunos de ellos, puedan
cumplirla de manera atenuada, bajo arresto domiciliario, con monitoreo
electrónico.





Améndola explicó
que pidieron que a la acusación fiscal por homicidio agravado por el concurso
premeditado de dos o más personas se sumen los agravantes de “alevosía” y
“homicidio por placer”.