Un protocolo de 1972 rige las emergencias en Mendoza

 Por Horacio Yacante

 

El terremoto ocurrido en Chile despertó en nuestra provincia
el interrogante sobre quién y cómo se hace cargo de la asistencia y la
coordinación ante un desastre natural de esas dimensiones, teniendo en cuenta
que Mendoza está en una zona sísmica. 

Las catástrofes y emergencias de esa naturaleza se rigen en
Mendoza por una ley sancionada hace más de cuatro décadas, que no ha tenido
actualización. Allí se establecen la creación del Centro de Operaciones de
Emergencia Provincial (COEP). Este órgano, aúna los esfuerzos de la Dirección
de Defensa Civil de Mendoza y la Dirección de Emergencia Social, ambos
dependientes de los ministerios de Seguridad y Desarrollo Social y Derechos
Humanos, respectivamente. El “olvido” fue tal que recién el año pasado el
gobernador Francisco Pérez renovó los integrantes del COEP que habían sido
nombrados en 1981.

 La ley que rige el tema es la 3796, sancionada durante los
últimos meses del gobierno demócrata de Francisco Gabrielli. Allí se establece
que en caso de que ocurran desastres naturales el Gobernador asume directamente
el control con la potestad de utilizar todos los recursos necesarios para
socorrer a las víctimas, que incluyen no solo las direcciones citadas sino
también la totalidad de los sistemas de seguridad y sanitario.

 Pérez reactivó el sistema de emergencias luego de los aludes
del año pasado y nombró nuevos integrantes.

Nuevo sistema de medición sísmica

Los programas de asistencia y socorro durante una crisis por
terremoto no serían posibles sin el trabajo de medición sísmica. Si bien es
imposible predecir un sismo, la provincia cuenta con  la colaboración de un organismo encargado de
monitorear de manera constante los movimientos telúricos y “plantear
escenarios” para la contención de la población en caso de catástrofes.

 Desde 2012, el Centro Regional de Desarrollos Tecnológicos
para la Construcción, Sismología e Ingeniería Sísmica (CeReDeTeC), dependiente
de la Universidad Tecnológica Nacional Facultad Regional Mendoza, cumple el rol
de aportar información constante y precisa de cada movimiento sísmico que
ocurre en el territorio.

 De acuerdo a su directora, la ingeniera Noemí Graciela
Maldonado, una de las funciones del centro es la de aportar la información
sismológica necesaria para que los órganos de seguridad, como el COEP, puedan
realizar “planteos de escenarios”, tomando como referencia la ubicación del
epicentro y la ubicación e intensidad de las consecuentes réplicas.

 El CeReDeTeC, funciona desde 1996 en la universidad y desde
2012 reemplazó a la antigua Agencia Sismológica de Mendoza, que cumplió
servicios durante más de medio siglo. El centro regional cuenta con tecnología
de avanzada y mantiene una red 74 simoscopios distribuidos en puntos
estratégicos de Capital, Godoy Cruz, Capital, Guaymallén y Luján de Cuyo.