San Martín en Cuyo: cómo fue el gobierno que transformó la historia de Mendoza
Por Francisco Pérez Osán
El general José de San Martín es conocido universalmente por participar de la campaña que liberó a gran parte de Latinoamérica, pero para Mendoza tiene una importancia aún mayor, ya que su gobernación, de la cual se cumplieron ayer 200 años, transformó completamente la provincia.
El director del Memorial de la Bandera del Ejército de los Andes, Fabián Agostini, explicó a Diario Vox que San Martín como Gobernador Intendente de Cuyo se avocó a formar el ejército que luego cruzaría Los Andes, pero para conseguirlo tuvo que reorganizar el funcionamiento de la provincia en todos los aspectos.
“San Martín llega en 1814 con la intención de formar el Ejército Libertador, pero demuestra una gran capacidad de liderazgo, y marca un antes y un después en la historia mendocina, ya que trabaja en todos los planos de gobierno”, explicó el historiador.
“La sociedad lo recibe bien y se pliega a su proyecto”, comentó, “porque San Martín llegaba con la fama que le habían dado las victorias contra los franceses en Europa”. Además, el “impresionante carisma” que tenía el militar sirvió para convencer a los pobladores de que los esfuerzos que habrían de realizar eran en pos de liberarse de los españoles.
Sus obras como gobernante
“En salud, por ejemplo, como necesitaba que los hombres estuvieran sanos para participar del ejército, impuso la vacuna antivariólica, que acababa de llegar al Río de la Plata”, señaló Agostini. “También se ocupó de la organización social”, agregó, y al respecto indicó que “prohibió que entraran caballos al galope a la Alameda, o que la gente dejara los caballos en cualquier lado”.
También “impulsó el blanqueo de los frentes de las casas, la extensión de las acequias y la creación de canales de riego, para mejorar la irrigación de las tierras de cultivo”. Otra de las industrias que impulsó mientras estuvo en el gobierno fue la minería, así como lo necesario para poder conseguir los insumos necesarios para su ejército.
De todas maneras, el director aseguró que la principal preocupación de San Martín, fuera de la militar, fue la educación: “Creó el primer colegio secundario (colegio de la Santísima Trinidad) y también la primera biblioteca”. La pasión por la lectura del general lo llevó a viajar con un baúl con 800 libros desde Europa, libros que llevó por toda América, y que fue donando a las diversas bibliotecas que fundó.
Para formar el ejército
Agostini señaló que “armar un ejército de cinco mil hombres no era tarea fácil”, pero San Martín lo consiguió tanto mediante el apoyo de los mendocinos, que “dieron todo”, como por confiscaciones a quienes no querían ayudar a la causa.
El historiador graficó cómo se manejaba San Martín a la hora de conseguir recursos: “Una señora había estado hablando mal de la causa libertadora, y en vez de encarcelarla, le impone una multa, que consistía en pagar una multa con zapallos”.
El general José de San Martín es conocido universalmente por participar de la campaña que liberó a gran parte de Latinoamérica, pero para Mendoza tiene una importancia aún mayor, ya que su gobernación, de la cual se cumplieron ayer 200 años, transformó completamente la provincia.
El director del Memorial de la Bandera del Ejército de los Andes, Fabián Agostini, explicó a Diario Vox que San Martín como Gobernador Intendente de Cuyo se avocó a formar el ejército que luego cruzaría Los Andes, pero para conseguirlo tuvo que reorganizar el funcionamiento de la provincia en todos los aspectos.
“San Martín llega en 1814 con la intención de formar el Ejército Libertador, pero demuestra una gran capacidad de liderazgo, y marca un antes y un después en la historia mendocina, ya que trabaja en todos los planos de gobierno”, explicó el historiador.
“La sociedad lo recibe bien y se pliega a su proyecto”, comentó, “porque San Martín llegaba con la fama que le habían dado las victorias contra los franceses en Europa”. Además, el “impresionante carisma” que tenía el militar sirvió para convencer a los pobladores de que los esfuerzos que habrían de realizar eran en pos de liberarse de los españoles.
Sus obras como gobernante
“En salud, por ejemplo, como necesitaba que los hombres estuvieran sanos para participar del ejército, impuso la vacuna antivariólica, que acababa de llegar al Río de la Plata”, señaló Agostini. “También se ocupó de la organización social”, agregó, y al respecto indicó que “prohibió que entraran caballos al galope a la Alameda, o que la gente dejara los caballos en cualquier lado”.
También “impulsó el blanqueo de los frentes de las casas, la extensión de las acequias y la creación de canales de riego, para mejorar la irrigación de las tierras de cultivo”. Otra de las industrias que impulsó mientras estuvo en el gobierno fue la minería, así como lo necesario para poder conseguir los insumos necesarios para su ejército.
De todas maneras, el director aseguró que la principal preocupación de San Martín, fuera de la militar, fue la educación: “Creó el primer colegio secundario (colegio de la Santísima Trinidad) y también la primera biblioteca”. La pasión por la lectura del general lo llevó a viajar con un baúl con 800 libros desde Europa, libros que llevó por toda América, y que fue donando a las diversas bibliotecas que fundó.
Para formar el ejército
Agostini señaló que “armar un ejército de cinco mil hombres no era tarea fácil”, pero San Martín lo consiguió tanto mediante el apoyo de los mendocinos, que “dieron todo”, como por confiscaciones a quienes no querían ayudar a la causa.
El historiador graficó cómo se manejaba San Martín a la hora de conseguir recursos: “Una señora había estado hablando mal de la causa libertadora, y en vez de encarcelarla, le impone una multa, que consistía en pagar una multa con zapallos”.
