Juró la camada de Diputados con más mixtura de las últimas décadas

Habrá una decena de bloques con el más variado tinte político e ideológico. El legislador oficialista Néstor Parés fue reelecto como presidente de la cámara.


Al igual que el Senado el lunes pasado, el acto de asunción de los nuevos diputados provinciales fue breve y con escaso colorido. La principal novedad pasó por la mixtura de bloques con los que contará la Cámara durante los próximos dos años gracias al desembarco de nuevos partidos y la fragmentación del justicialismo. Néstor Parés fue reelecto como presidente y María Cristina Pérez como vicepresidente.


Tras una década de discusiones parlamentarias reducidas a pocas fuerzas políticas, la Cámara Baja contará durante los próximos dos años con una nutrida participación. Esta mixtura se debe a la generación de una decena de bloques que abarcan desde el arco oficialista hasta las fuerzas de oposición.


Tal como dejaron en evidencia las elecciones legislativas de 2017, la novedad pasa por el desembarco en la política del Partido Intransigente. Una fuerza que nació como correlato del accionar de la ONG Protectora en contra de los abusos a los consumidores, principalmente de parte de las empresas monopólicas de servicios públicos. Con Mario Vadillo a la cabeza, el bloque se compone además por los diputados Eduardo Martínez y Pablo Cairo, quienes complementarán el esquema de formación liberal conformado además por tres senadores provinciales y José Ramón en el Congreso de la Nación.


Otra fuerza, aunque mucho menor, que llega a la Legislatura es la compuesta por el diputado Mauricio Torres de Unión Popular. Se trata de un bloque unipersonal que guarda similitudes ideológicas con el del Frente Renovador de Guillermo Pereyra, quien tiene mandato hasta 2020.


Desunidos pero organizados, los diputados justicialistas dieron la nota de color al materializar su división. Agrupados tras el camporista Lucas Ilardo, el nuevo arco opositor (dentro de la oposición), los diputados Omar Parisi, Jorge Tanús y los recientemente ingresados Marcelo Aparicio y Helio Perviú, formarán parte del bloque “Podemos Vivir Mejor” de marcado tinte gremialista y coincidente con los lineamientos de la ex presidente y actual senadora nacional Cristina Fernández.


En la otra vereda se ubican los “territoriales”. Un grupo de legisladores que responden a los intereses de los intendentes justicialistas Emir Félix (San Rafael), Alejandro Bermejo (Maipú), Jorge Giménez (San Martín), Roberto Righi (Lavalle) y Martín Aveiro (Tunuyán),y que indistintamente han votado las reformas propuestas por el Poder Ejecutivo.


Con una mayoría “teórica” el Frente Cambia Mendoza se presentará dividido en cinco bloques. El más importante por su número y filiación es el conformado por la Unión Cívica Radical que responde de manera directa al presidente del partido y gobernador de la Provincia. El segundo en importancia es el PRO, que a la banca de Pablo Priore se suman otras dos más para Hebe Casado y Álvaro Martínez. Una adición que les dará mayor peso dentro de la estructura frentista y una plataforma para luchar por el posicionamiento de Omar De Marchi como precandidato a gobernador en 2019.


Junto a los ya mencionados diputados de UP y el FR, se suma la díscola participación de Marcos Niven. Además de fundamentar su oposición interna dentro del frente, el flamante presidente del Partido Demócrata adelantó su intención de posicionar a otros referentes partidarios en otros cargos ejecutivos.


Cierra el esquema las diputadas del Frente de Izquierda y los Trabajadores junto a Macarena Escudero y la recientemente ingresada Mailé Rodríguez, quien cuenta con una experiencia como edil de Guaymallén, donde se posicionó como referente en materia de derechos por la igualdad de género.


Salvo por la oposición del diputado demócrata y la abstención de la izquierda, Néstor Parés contó con el apoyo mayoritario del resto para renovar su puesto como presidente de la Cámara, secundado por la justicialista María Cristina Pérez en representación del justicialismo.