Alerta mundial por la gripe K: qué es, cómo se contagia y por qué piden vacunarse urgente
Una ola inédita de infecciones por gripe encendió alertas globales debido a la rápida expansión de la variante H3N2 subclado K, que adelantó la temporada entre 3 y 6 semanas y superó todas las previsiones epidemiológicas.
El impacto ya se siente con fuerza en Estados Unidos, Europa y Japón, donde hospitales y guardias atraviesan jornadas de extrema tensión, con salas desbordadas y una demanda sanitaria que aumenta a diario, especialmente entre niños pequeños y adultos mayores.
Día Mundial de la Lucha contra el Sida: cifras, avances y desafíos que aún persisten
Según la Organización Mundial de la Salud, la propagación del virus está ocurriendo a una velocidad "inusualmente acelerada", alterando los patrones tradicionales de circulación.
La situación se complica por la coexistencia con el VRS y el SARS-CoV-2, lo que obliga a realizar diagnósticos múltiples que prolongan la atención. En España, la incidencia es diez veces mayor que la del año anterior; en Alemania, Canadá y el Reino Unido se activaron planes de emergencia, y varias regiones reinstalaron el uso obligatorio de mascarilla en centros sanitarios. El panorama descrito por el personal médico es categórico: pasillos abarrotados, urgencias saturadas y equipos exhaustos.
Aunque la variante K no parece generar cuadros más severos en personas vacunadas, su capacidad de transmisión es notablemente superior debido a mutaciones que permiten esquivar parcialmente la inmunidad previa.
Alerta Nacional por sarampión: cuáles son los síntomas y cómo prevenir
Entre los síntomas más comunes se registran fiebre alta repentina, dolores musculares intensos, fatiga marcada, tos seca y, en algunos casos, diarrea o dolor abdominal. En niños es frecuente el dolor de oído y una disminución evidente de la actividad.
Ante este escenario, el mensaje europeo es contundente: "Vacúnese sin demora". Según los primeros reportes del Reino Unido, la inmunización reduce entre 70% y 75% las hospitalizaciones pediátricas y entre 30% y 40% en adultos.
Los especialistas insisten también en reforzar medidas esenciales como la ventilación, el lavado de manos, el uso de mascarilla ante síntomas y evitar la automedicación. La OMS resume el mensaje con claridad: "Incluso con cepas que evolucionan, la vacuna antigripal sigue siendo decisiva para prevenir hospitalizaciones y muertes".
