Las frases más escuchadas cuando hace frío y toda su inconveniencia
Pero el tema es tan contemporáneo, que una charla cualquiera (en el almacén, el banco, la estación de servicio, la cancha, la oficina, la escuela y todos los etcéteras que se ocurran) te lo transforman en el eje de la conversación.
ESCENA UNO (entre dos personas que conversan ocasionalmente)
- “¡Qué frío!”
- “Cuánto frío”.
- “Insoportable el frío. Soy de esas personas que les gusta el calor y que andan deseando que esté calentito todo el año”.
- “El frío no me lo banco, me re tira pa’ abajo”
ESCENA DOS (entre dos compañeros de oficina al borde de una gélida idiotez)
- “Dame una temperatura de 145 grados, con la piel calcinada, surfeando en el asfalto derretido. Ahí soy feliz”.
- “No sé de que te quejás, ¿no es que no te bancás el calor?”
- “Con este frasquete, al menos tengo claro que me gusta el calor. Me gusta el solcito fuerte y actúo en consecuencia. Que la estufa, que el café, que la frazada. Dejame de joder”.
ESCENA TRES (entre dos compañeros de oficina que van a entrar en calor a los golpes)
- “Boca consiguió algo único: llevar el frío a Brasil”.
- Al menos no tengo esa hipotermia permanente que genera Racing… RA-CI-N…!!!
ESCENA CUATRO (entre dos personas que se apuran…)
- “¿Te gusta andar abrigado? O sea, te gusta el frío para no tener frío. Para eso que haga calor. Y me ahorro todo eso de la estufa, la frazada, el café.”
- “En vez de la doble frazada, prefiero sacarme toda la ropa”.
Hace frío, es así en invierno. Es lógico, los días son menos aprovechables al exterior. Se hace de noche a las 7 de la tarde y hace frío en el baño (sobre todo cuando nos levantamos de madrugada para cumplir con alguna exigencia fisiológica). “Hay que pasar el invierno”, decía un chanchoministro… ¿Eh? Mejor, no me hagá calentá…
ESCENA UNO (entre dos personas que conversan ocasionalmente)
- “¡Qué frío!”
- “Cuánto frío”.
- “Insoportable el frío. Soy de esas personas que les gusta el calor y que andan deseando que esté calentito todo el año”.
- “El frío no me lo banco, me re tira pa’ abajo”
ESCENA DOS (entre dos compañeros de oficina al borde de una gélida idiotez)
- “Dame una temperatura de 145 grados, con la piel calcinada, surfeando en el asfalto derretido. Ahí soy feliz”.
- “No sé de que te quejás, ¿no es que no te bancás el calor?”
- “Con este frasquete, al menos tengo claro que me gusta el calor. Me gusta el solcito fuerte y actúo en consecuencia. Que la estufa, que el café, que la frazada. Dejame de joder”.
ESCENA TRES (entre dos compañeros de oficina que van a entrar en calor a los golpes)
- “Boca consiguió algo único: llevar el frío a Brasil”.
- Al menos no tengo esa hipotermia permanente que genera Racing… RA-CI-N…!!!
ESCENA CUATRO (entre dos personas que se apuran…)
- “¿Te gusta andar abrigado? O sea, te gusta el frío para no tener frío. Para eso que haga calor. Y me ahorro todo eso de la estufa, la frazada, el café.”
- “En vez de la doble frazada, prefiero sacarme toda la ropa”.
Hace frío, es así en invierno. Es lógico, los días son menos aprovechables al exterior. Se hace de noche a las 7 de la tarde y hace frío en el baño (sobre todo cuando nos levantamos de madrugada para cumplir con alguna exigencia fisiológica). “Hay que pasar el invierno”, decía un chanchoministro… ¿Eh? Mejor, no me hagá calentá…
