Horóscopo: los signos más hipocondríacos que conocerás

Estas personas le temen tanto a las enfermedades, que todo el tiempo creen estar padeciendo una. Según los astros hay 3 signos que se destacan por ello.

Existen muchas personas que ante el mínimo dolor de cualquier parte del cuerpo ya reaccionan impulsivamente, se asustan y hasta llegan a creer que se avecina una enfermedad con un posible desenlace fatal. A ese tipo de personas se los conoce como hipocondríacos.

Horóscopo: los signos que aman a los animales más que a las personas

Según explican los astros, esto está muy ligado al mes en el que nacimos. Por eso dentro de la astrología es fácil distinguir quienes son aquellos integrantes del zodiaco que se caracterizan por creer que siempre están enfermos.

Virgo: la exageración a flor de piel. Sufren mucho pensando en su salud, todo lo proyectan hacia el futuro de una manera fatalista y son expertos enfermando su mente.

Además son nerviosos y paranoicos, motivo que los hace estar consultando al médico de forma constante. Nunca están tranquilos y se dejan llevar más por las emociones que por la razón.

Libra: le tienen miedo a los médicos, dentro de sus hobbies favoritos definitivamente no está ir a clínicas ni hospitales, pero cuando empiezan a sentir algún tipo de dolor, recurren a cualquier parte para que les aseguren que no están desahuciados.

Sin embargo, esto tampoco les garantiza nada, porque están fielmente convencidos que los exámenes, procedimientos o resultados están equivocados. Son por lejos, los reyes del drama.

Horóscopo: cuidado con ellos, que son los signos más dominantes del zodiaco

Capricornio: hacen lo que esté a su alcance para no enfermarse de nada. Le tienen miedo a la muerte y siempre van un paso adelante cuando van a consultar algún diagnóstico.

Viven angustiados constantemente y cuando se trata de enfrentar a una situación médica empiezan a sufrir antes de tiempo, porque piensan que tienen una enfermedad muy grave. Aunque en ocasiones caen en cuenta de los temores causados por su imaginación. A menudo se dejan llevar por el fatalismo. 

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