El frío fue el gran protagonista de una mañana lenta con mucha presencia de gendarmes

La gente esperó hasta el mediodía para acercarse a las escuelas. El desarrollo fue tranquilo, fluido y sin disturbios. Hubo mucha seguridad con presencia de policías y gendarmes.


Los primeros comicios de 2017 iniciaron más lento de lo esperado debido al frío intenso de la mañana. En algunas zonas del área metropolitana la sensación térmica se ubicó por debajo de los cero grados y con heladas por el cielo diáfano. Casi sin ausentismo de los presidentes de mesa, la organización fue correcta y la votación arrancó sin inconvenientes ni demoras pasadas las 10.30.


A diferencia de años anteriores, estas PASO (Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias) se caracterizaron por una correcta organización y el dispositivo de seguridad. Gendarmería Nacional tuvo una nutrida presencia en las principales escuelas departamentales con hasta cuatro efectivos por establecimiento. Con más experiencia en actos electivos, no solo se destacaron por mantener el orden sino que muchos de ellos se dedicaron a ayudar a los ciudadanos que no encontraban sus mesas o no se encontraban en el padrón. La Policía de Mendoza y las agencias municipales también colaboraron. Éstas últimas cumplieron un papel fundamental para evitar la congestión vehicular en las entradas a los establecimientos educativos.


La decisión de que directivos y docentes ejercieran como autoridades electorales recolectó los frutos esperados ya que la concurrencia fue la esperada y casi no hubo presidentes de mesa ausentes. Y en los casos en los que faltaron, los vicepresidentes se hicieron cargo rápidamente de la situación, según destacaron en escuelas consultadas por Diario Vox. En consecuencia, entre las 8.15 y las 8.30 la gran mayoría ya estaba funcionando correctamente para los pocos “valientes” que salieron de sus casas abrigados con sobretodos, gorritos y guantes en las manos.


Como ya se ha vuelto folklore, los fiscales partidarios dieron la nota de color en la jornada. En las escuelas más populosas como la Gregorio Las Heras, ubicada en la ciudad cabecera del departamento homónimo, los “ánimos” tuvieron que ser calmados por la autoridad electoral y así garantizar la armonía de los comicios. Según explicaron, existía un marcado malhumor de algunos partidos políticos sobre cómo se había dispuesto la ubicación de las boletas dentro del cuarto oscuro.


Las subjetividades se extendieron en todos los departamentos y Capital no fue la excepción. En la tradicional escuela Normal Tomás Godoy Cruz, los fiscales destacaron los repetidos ingresos al cuarto oscuro para certificar la cantidad de boletas, incluso en horarios en que la elección había comenzado hace pocas horas. Por este motivo se pidió a los presidentes de mesa que tuvieran una especial atención para evitar que no tuviera una consecuencia negativa en el ritmo de la votación.