Después del milagro de los 33, en Ecuador mueren cuatro mineros

Los rescatistas sacaron los restos de los últimos dos mineros, luego de que fueran localizados a unos 150 metros de profundidad.


Los equipos de rescate hallaron a un cuarto trabajador muerto de una mina de oro ubicada en el sur de este país, donde inicialmente habían quedado atrapados el viernes los cuatro mineros.

Hasta la tarde del miércoles las autoridades habían expresado "esperanza" de hallar con vida a dos mineros que estaban desaparecidos, lo cual no sucedió.

No se informó inicialmente la causa de las muertes. El minero y rescatista identificado como Georgi Ramírez, quien estuvo en el lugar del hallazgo en las profundidades de la mina, dijo a la red de televisión Ecuavisa que "llegamos arriba y encontramos a uno arrimado contra a pared, pero sin ropa".
 
El presidente Rafael Correa había visitado horas antes la mina de oro Casa Negra, cerca de la población de Portovelo, 400 kilómetros al suroeste de la capital, donde destacó que "se ha hecho lo humanamente posible" para encontrar a los dos mineros. Otros dos de los trabajadores de la mina fueron hallados muertos al día siguiente del colapso del yacimiento ocurrido el viernes.

Uno de los fallecidos fue el peruano Paúl Aguirre, cuyos restos fueron enviados a su país. "El objetivo es llegar a los compañeros mineros y, si Dios quiere, encontrarlos vivos", había declarado el presidente. Correa también se reunió con las esposas y familiares de los mineros.

Un nuevo deslizamiento retrasaba el rescate porque taponó la entrada del socavón, informó César López, técnico de la propietaria de la concesión, la empresa Minesadco.

Previamente, el ministro interino de Recursos Naturales No Renovables, Carlos Pareja, había informado que la madrugada del miércoles los rescatistas encontraron las linternas de los dos mineros amarradas y una bota, lo que indicaría que se estaban acercando a donde se hallaban.

Decenas de rescatistas cumplieron turnos de 24 horas a 150 metros de profundidad para desbloquear una galería del derrumbe que atrapó a los mineros. No se usó maquinaria para la excavación porque la vibración provocaría nuevos derrumbes, de acuerdo con los expertos.