Tensión en Boca: dos futbolistas lanzaron una dura advertencia a Riquelme
La interna en Boca Juniors explotó este miércoles luego de que Marcos Rojo y Marcelo Saracchi fueran separados del plantel de Primera División por decisión del técnico Miguel Ángel Russo, en medio de una profunda crisis futbolística e institucional.
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Lejos de aceptar la medida en silencio, ambos futbolistas enfrentaron cara a cara a Raúl Cascini y Marcelo Delgado, integrantes del Consejo de Fútbol, y dejaron en claro su descontento.
Todo se desató cuando, al llegar al predio de Ezeiza, los jugadores fueron notificados por un utilero de que no entrenarían junto al resto del equipo. Sus pertenencias fueron trasladadas a un sector apartado, sin mayores explicaciones. Poco después, fueron citados a una oficina donde Cascini y Delgado les comunicaron que habían sido marginados por un presunto acto de indisciplina. Juan Román Riquelme, presidente del club, no participó del encuentro porque llegó tarde al entrenamiento.
"Boca pierde, juega mal y los culpables somos nosotros? Todos los días tienen problemas y nos culpan a nosotros? Si nos quieren echar del vestuario, que venga Riquelme a hablar".
De Rojo y Saracchi a Cascini y Delgado.
Se quedaron en el vestuario de Primera.
@radiolared. pic.twitter.com/BKjRW7wLUb— Martin Arevalo (@arevalo_martin) July 30, 2025
La reacción de Rojo y Saracchi fue inmediata y contundente. Según reveló el periodista Martín Arévalo, ambos jugadores cuestionaron duramente la decisión y apuntaron directamente al Consejo de Fútbol: "¿Todos los días tienen problemas y se quieren limpiar con nosotros? Boca no juega a nada, no gana un partido, ¿y los culpables somos nosotros?", lanzaron.
Lejos de quedarse ahí, agregaron: "Ustedes nos ven, entrenamos todos los días con la mejor cara, sabiendo que no íbamos a jugar. En el Mundial de Clubes nos rompimos el alma y siempre tiramos para adelante por todos, ¿y nos pagan así? Queriéndonos sacar del grupo. Es una vergüenza lo que están haciendo con nosotros".
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El clima se tensó aún más cuando ambos lanzaron una advertencia que sacudió los pasillos del club: "Nosotros vamos a cambiarnos en el vestuario de Primera. Si quieren echarnos, que venga Riquelme, que dé la cara y arreglemos la salida".
