River perdió ante Gremio y ahora deberá ganar en Brasil
River Plate no le encontró la vuelta al planteo de Gremio y terminó sufriendo una derrota 1 a 0, en el estadio Monumental, por el partido de ida de una de las semifinales de la Copa Libertadores. La revancha será en Porto Alegre el martes de la próxima semana a las 21.45. El equipo de Marcelo Gallardo estará obligado a ganar para meterse en la final del torneo.
Desde el arranque, el equipo brasileño mostró que sabe jugar estas instancias decisivas y que tiene oficio para no perder la calma y molestar a los rivales.
El Millonario no se sintió cómodo en la primera mitad. Le costaba tener la pelota y, cuando la tenía, no encontraba huecos en la defensa del conjunto brasileño.
Ni el colombiano Quintero, ni Palacios y menos Martínez lograban asociarse con Scocco y Santos Borré. Los minutos pasaban y River por momentos perdía la paciencia.
Las únicas dos llegadas que generó en la primera etapa fueron idénticas: dos remates desde afuera del área de Palacios que rechazó el arquero Marcelo Grohe.
Gremio seguía tranquilo porque el partido se jugaba como quería. Los defensores marcaban de cerca de Scocco y Santos Borré y los delanteros no tenían espacios o recibían incómodos de espalda al arco.
En el segundo tiempo, el desarrollo del partido no cambió. River siguió jugando sin espacios y Gremio continuó haciendo su juego, molestando, raspando y haciendo que los minutos pasaran y el local se pusiera nervioso.
El entreador Marcelo Gallardo sacó a Scocco, de flojo nivel, y puso a Pratto para tener más presencia en el área.
A los 17 minutos, en un córner, llegó el baldazo de agua fría para los miles de hinchas que fueron al estadio Monumental. Michel ganó en lo alto y cabeceó en el área chica para poner el 1 a 0 a favor de Gremio.
Con ventaja, el equipo visitante jugó aún más tranquilo y no se salió del plan de no dejar moverse a River cortando con faltas o marcas personales. Quintero no logró encontrar los pases filtrados que suele encontrar y el Pity Martínez estuvo desconectado del juego.
El Millonario no le encontró la vuelta a Gremio. No supo qué hacer con la pelota y a medida de que pasaron los minutos el equipo se puso más nervioso y sin ideas.
