El sincericidio de Franco Colapinto sobre la exigente carrera en Singapur

Franco Colapinto atraviesa días decisivos en la Fórmula 1. El piloto argentino no tiene asegurado un lugar en la parrilla de 2026 y, mientras pelea por su continuidad en la categoría, también busca sumar sus primeros puntos en Alpine.

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Este fin de semana, regresa la acción en el Gran Premio de Singapur, uno de los circuitos más exigentes de la temporada por sus características urbanas y las extremas condiciones de temperatura y humedad.

El Alpine A525, con el que compite desde el inicio del campeonato, mostró fallas recurrentes que complican a la escudería francesa y que mantienen al equipo lejos de los puestos de vanguardia. En la previa al GP nocturno de Marina Bay, Colapinto fue claro al describir sus sensaciones.

"El coche es impredecible y nos complica entender qué va a hacer en cada momento y en cada situación. En los circuitos urbanos no hay margen de error, así que siempre es más difícil en una pista con muros".

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La exigencia física y técnica del trazado asiático se combina con otra dificultad para el bonaerense: su llegada al equipo se dio sin el kilometraje de pruebas que tuvieron otros pilotos. Eso lo obligó a acelerar un proceso de adaptación a la Fórmula 1, en un contexto en el que el auto no le brindó las herramientas necesarias.