Bachelet categórica: La respuesta a la crisis del COVID-19 no funciona

La expresidenta chilena y Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, dijo que las medidas que se han tomado para abordar la pandemia no solucionan los problemas de las comunidades más afectadas en el mundo.

En un artículo de opinión la expresidenta y Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet junto a Guy Ryder y Olivier De Schutter, explicaron que Las medidas que han tomado los gobiernos para responder a la emergencia del coronavirus y a la crisis que ésta ha generado merecen ser destacadas  pero que aun presentan dos grandes limitaciones. 

Por un lado el carácter temporal y de corto plazo de las provisiones; y, en segundo, que no abordan las amenazas existenciales que afrontan muchas de las comunidades más afectadas del mundo.

En ese sentido apuntan que los planes de respuesta a la pandemia de COVID-19 han incluido permisos pagados, transferencias de efectivo y apoyo familiar que han servido en lo inmediato. Aunque advierten que este tipo de medidas "no producen cambios en las circunstancias subyacentes que dejaron a millones de personas vulnerables, ni mejoran su situación frente a futuras crisis".

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En cuanto al gasto que los gobiernos del mundo han destinado para dar respuesta al COVID-19, el cual ya supera los once billones de dólares, sostienen que esos recursos han cubierto básicamente a los países ricos, mientras que los países en desarrollo, no pueden implementar la respuesta a la crisis que necesita su población ni los sistemas de protección social a largo plazo que crearían resiliencia ante las crisis.

Al respecto recuerdan que, antes de la pandemia, el 69% de la población mundial no contaba con una cobertura de seguridad social o la tenía parcial.

"Si queremos crear una mayor resistencia y una capacidad de recuperación más eficaz, tenemos que apoyar a todos los países en la creación de niveles mínimos de protección social sólidos", detallaron los autores del artículo.

Por último Bachelet, Ryder y De Schutter recalcaron que sólo se podrá afrontar la desigualdad que ha generado este crisis sanitaria "si todo el mundo tiene un nivel mínimo de protección social, incluidos los más pobres y marginados".

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