Aseguran que son bajas las radiaciones provocadas por las antenas de celulares
Es que miembros de la Organización Mundial de la Salud, reunidos en la ciudad francesa de Lyon, prometieron dar hoy su veredicto sobre si las ondas que emiten los teléfonos móviles pueden aumentar la probabilidad de los usuarios de desarrollar tumores o no. Este viejo debate se instauró hace años luego del furor que hicieron los celulares en todo el mundo.
En Mendoza, el ingeniero José Balacco, director del departamento de electrónica de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), lleva un mensaje tranquilizador a la sociedad.
“Hacemos mediciones sobre las ondas que emanan distintas antenas, tanto las de celulares como las de radio, con respecto a las normativas vigentes y podemos decir que son muy bajas”, explicó Balacco.
En términos técnicos lo que se mide son las radiaciones no ionizantes. “En el caso de las antenas de celulares, el máximo permitido es 450 microbatios por cm2, y nuestras mediciones indican que en promedio hay 1 microbatio por cm2, lo que sería 100 veces menos de los establecido”, aclaró.
Para él, la radiación no es perjudicial en sí misma sino que “todo depende de los niveles, es más, encontramos niveles más altos en las ondas de FM que en las de telefonía móvil”.
“Hasta ahora no hay indicaciones serias que muestren que haya un riesgo para la salud, lo único que está probado es que provocan una elevación en la temperatura del ambiente”, concluyó Balacco.
Para los usuarios, los efectos nocivos que podrían llegar a provocar los móviles son menores en relación a las soluciones que les aporta este pequeño adminículo de la vida moderna. “No podría vivir sin celular, me sirve para el trabajo y sobre todo para quedarme tranquila y saber cómo está mi hijo”, declaró Romina. “La sociedad lo impone como necesario, y para oponerse todos deberían dejar de utilizarlo, porque sino te quedás afuera”, dijo Germán.
En Mendoza, el ingeniero José Balacco, director del departamento de electrónica de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), lleva un mensaje tranquilizador a la sociedad.
“Hacemos mediciones sobre las ondas que emanan distintas antenas, tanto las de celulares como las de radio, con respecto a las normativas vigentes y podemos decir que son muy bajas”, explicó Balacco.
En términos técnicos lo que se mide son las radiaciones no ionizantes. “En el caso de las antenas de celulares, el máximo permitido es 450 microbatios por cm2, y nuestras mediciones indican que en promedio hay 1 microbatio por cm2, lo que sería 100 veces menos de los establecido”, aclaró.
Para él, la radiación no es perjudicial en sí misma sino que “todo depende de los niveles, es más, encontramos niveles más altos en las ondas de FM que en las de telefonía móvil”.
“Hasta ahora no hay indicaciones serias que muestren que haya un riesgo para la salud, lo único que está probado es que provocan una elevación en la temperatura del ambiente”, concluyó Balacco.
Para los usuarios, los efectos nocivos que podrían llegar a provocar los móviles son menores en relación a las soluciones que les aporta este pequeño adminículo de la vida moderna. “No podría vivir sin celular, me sirve para el trabajo y sobre todo para quedarme tranquila y saber cómo está mi hijo”, declaró Romina. “La sociedad lo impone como necesario, y para oponerse todos deberían dejar de utilizarlo, porque sino te quedás afuera”, dijo Germán.
