Aseguran que se desfinanciaron los programas de Salud

Desde el Gobierno dicen que parte de ese desfinanciamiento tiene que ver con el mal manejo del Instituto de Juegos y Casinos. Hoy hay una manifestación por los despidos.


Desde hace varios años los programas oficiales de salud están desfinanciados, particularmente los que atienden a personas con enfermedades que implican altos costos. Desde el Gobierno aseguran que parte de ese desfinanciamiento tiene que ver con el mal manejo del Instituto de Juegos y Casinos.


Es que ese organismo tiene como misión financiar los programas de salud a través de la transferencia de remesas que se generan con las apuestas. Pero, según la información oficial enviada por la gestión actual, esas transferencias han caído abruptamente: en 2009 se enviaron casi 73 millones de pesos. Y en 2015 fueron 66 millones de pesos. En el medio hubo una inflación enorme que también hizo que esos recursos alcanzaran para mucho menos.



En contrapartida, denuncian, los gastos de personal del casino se multiplicaron: de 35 millones de pesos en 2009 a 233 millones de pesos el año pasado.


El Instituto de Juegos y Casinos tiene la obligación de transferir el al menos el 35% de sus utilidades a programas sociales y de salud. Esos recursos tienen como destino la compra de medicamentos oncológicos, de tratamiento contra el sida, programa de prevención y desarrollo social.



Se agregaron “trampitas” en la norma


Sin embargo se agregaron “trampitas” en la norma: para calcular el 35% se descuentan los gastos de personal, ganancias y obras públicas que inicie el Casino. Además, en el medio se renegoció el contrato con el concesionario del Casino central, duplicándole las ganancias a la empresa (perteneciente al grupo Vila) y reduciendo los ingresos del Estado.



El Gobierno de Cornejo difundió la información en el marco de un conflicto gremial latente. El viernes anunciaron la caída de 84 contratos y por eso se iniciaron medidas de fuerza en el Casino. Entre otras cosas se montó una carpa y se preparan otras protestas.


De los 84 contratos anulados, hay 80 personas que directamente fueron anuladas como empleadas. Además hay 4 mujeres que están en licencia por maternidad y están protegidas por la ley, pero que también serían dadas de baja una vez que se les termine la licencia.


El sindicato Unión Personal de Juego Casino de Mendoza decidió un paro por 72 horas desde el sábado y un acampe sobre la vereda del Instituto. Además hay una convocatoria para una concentración hoy a las 9.