Aseguran que la tarifa social no llega a los más vulnerables

Con la pérdida de credibilidad de las estadísticas publicadas por el Indec, que se profundizó en los últimos años del gobierno anterior, el informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina pasó a ser el documento de referencia para medir y comprender la realidad en materia de pobreza e indigencia. Además, el equipo de profesionales responsable del Observatorio fue incorporando otras variables que permiten estudiar las distintas dimensiones de la pobreza. Entre ellas, el acceso a los servicios básicos de electricidad, gas y transporte que resultan esenciales para evaluar la calidad de vida de las personas.

Al respecto, el informe dice que en los hogares con carencias en derechos sociales el déficit del acceso a los servicios básicos alcanza al 34,1% de la población. Asimismo señala que para el año 2017, la falta de acceso a servicios básicos se registró con más fuerza entre los hogares en condición de pobreza, sin embargo uno de cada cuatro hogares no pobres están privados de este derecho, mientras que la proporción alcanza a la mitad de los hogares pobres e indigentes. Por otro lado, los hogares que tendieron a mejorar su situación en el marco de esta evolución fueron los hogares de estratos medios bajos y bajos con mayores niveles de integración socio-urbana.

En un contexto con fuertes aumentos en el costo de las tarifas de electricidad, gas, agua y transporte, el hecho de tener acceso a estos servicios no garantiza que se puedan pagar. Por eso, pese a la fuerte quita de subsidios, el gobierno decidió mantener algunos de esos subsidios a través de la tarifa social que está destinada especialmente a los sectores de menores ingresos.

Sin embargo, el informe subraya que “la tarifa social no llega a los más vulnerables”, lo cual representa un 31,4% de la población del país. De ese total, en promedio un 73,2% de los hogares más vulnerables no tiene acceso a la tarifa social en electricidad mientras que 8,6% ni siquiera tiene acceso al servicio. Al desagregarlo en estratos socio-ocupacionales, para la categoría “clase trabajadora marginal” el porcentaje sin acceso es de 60,7% aunque se incrementan en un 17,6% los hogares que no tienen acceso al servicio de electricidad. En la categoría “clase obrera integrada”, el 71,7%  no accede al beneficio social y el 11% no tiene acceso al servicio.

En cuanto al servicio de gas (sea  provisto por red de gas natural o envasado), el estudio destaca que solo el 14,1% de los hogares acceden a la tarifa social tomando como referencia el conjunto de los hogares y las unidades domésticas en situación de pobreza. En este ítem, en 2017 todavía el 25,4% de los hogares del país aún no contaba con red de gas natural. Y cuando se observan los sectores socioeconómicos más vulnerables, el porcentaje asciende al 50,1% mientras que en villas y asentamientos precarios un total de 83,7% no tiene  acceso al gas.