Prisión perpetua para Alejandro Amitrano

Esa fue la pena que le dio la Quinta Cámara del Crimen al padre de la pequeña Rosario Belén, asesinada en el año 1999.

La Justicia condenó a prisión perpetua a Alejandro Amitrano, de 40 años, por el asesinato de su hija Rosario Belén, quien murió tras sufrir una severa golpiza en 1999.
Así lo decidió la Quinta Cámara del Crimen que le dio la pena máxima al progenitor de la pequeña víctima que había estado prófugo 13 años desde el trágico episodio y que fue detenido casi dos años atrás en Paraná, provincia de Entre Ríos.
El acusado fue sentenciado por “homicidio agravado por el vínculo en concurso ideal con homicidio agravado por alevosía”. Por este mismo caso la madre de la pequeña, Cecilia Cousau había sido juzgada en el 2001, quedando absuelta del caso.
Tras escuchar la sentencia que dio el fiscal de Cámara Fernando Guzzo, Amitrano no realizó ninguna declaración, hasta que se encontró con las cámaras de televisión y fotografía a quienes los culpó de este desenlance. “Esto es culpa de ustedes”, les dijo a los trabajadores de prensa presentes antes de ser trasladado.
Se cierra así uno de los casos de violencia infantil más resonantes de Mendoza.