Se mantienen los videoclubs que ofrecen películas originales
Ese valor es sin sumar otros gastos como pueden ser la comida, y es para presenciar una película en una sala común; en caso de sala 3D, el costo se incrementa considerablemente. Ante esto, mucha gente opta por quedarse en casa y alquilar un filme en el videoclub de su barrio.
Sin embargo, muchos de estos comercios se han visto perjudicados por la piratería y la venta ilegal que llevan a cabo no solamente los vendedores ambulantes sino también locales habilitados. “Somos hoy en día la única opción que tiene la gente a la salida del cine. Nosotros ofrecemos al cliente un producto de muy buena calidad, pueden alquilar dos estrenos originales a 40 pesos. La piratería siempre afecta a la actividad, tenemos el ejemplo de lo que ocurrió con Blockbuster, que se tuvo que retirar claramente perjudicado por esta problemática. Por cada local que cierra o por cada mantero que vende películas truchas en la calle, se va cortando una cadena de trabajo organizado y reglamentado”, expresó Raúl Pilutti, dueño del videoclub Unimev.
“La gente se cansa de tener que comprar un DVD que no se ve bien, lo adquieren una sola vez y después no lo hacen más, eso puede una de las causas por las cuales muchos negocios de este sector han cerrado sus puertas. Además hay que tener en cuenta que con la restricción de las importaciones no es redituable comprar DVDs vírgenes que han subido de precio y después alquilarlos a un valor de 10 o 12 pesos, por decir un número. Eso es un plus más que importante que tenemos los propietarios que ofrecemos cintas originales”, detalla Pilutti.
El formato de disco óptico de nueva generación, Blu Ray, promete llevar un poco de esperanza a estos comerciantes del séptimo arte, ya que poco a poco “va ganando mercado”, según confió Pilutti.
“Hay personas que se interesan por ver bien y que no es lo mismo que comprar una película tirada en la calle. Por eso compran televisores de última tecnología en Chile a un costo mucho menor que el tenemos en nuestra provincia. También podemos ver una tendencia de que muchos clientes se comienzan a mostrar interesados además del Blu Ray por películas con formato 3D”, explicó la fuente consultada.
Sin embargo, muchos de estos comercios se han visto perjudicados por la piratería y la venta ilegal que llevan a cabo no solamente los vendedores ambulantes sino también locales habilitados. “Somos hoy en día la única opción que tiene la gente a la salida del cine. Nosotros ofrecemos al cliente un producto de muy buena calidad, pueden alquilar dos estrenos originales a 40 pesos. La piratería siempre afecta a la actividad, tenemos el ejemplo de lo que ocurrió con Blockbuster, que se tuvo que retirar claramente perjudicado por esta problemática. Por cada local que cierra o por cada mantero que vende películas truchas en la calle, se va cortando una cadena de trabajo organizado y reglamentado”, expresó Raúl Pilutti, dueño del videoclub Unimev.
“La gente se cansa de tener que comprar un DVD que no se ve bien, lo adquieren una sola vez y después no lo hacen más, eso puede una de las causas por las cuales muchos negocios de este sector han cerrado sus puertas. Además hay que tener en cuenta que con la restricción de las importaciones no es redituable comprar DVDs vírgenes que han subido de precio y después alquilarlos a un valor de 10 o 12 pesos, por decir un número. Eso es un plus más que importante que tenemos los propietarios que ofrecemos cintas originales”, detalla Pilutti.
El formato de disco óptico de nueva generación, Blu Ray, promete llevar un poco de esperanza a estos comerciantes del séptimo arte, ya que poco a poco “va ganando mercado”, según confió Pilutti.
“Hay personas que se interesan por ver bien y que no es lo mismo que comprar una película tirada en la calle. Por eso compran televisores de última tecnología en Chile a un costo mucho menor que el tenemos en nuestra provincia. También podemos ver una tendencia de que muchos clientes se comienzan a mostrar interesados además del Blu Ray por películas con formato 3D”, explicó la fuente consultada.