IBERTE cuestionó las afirmaciones de Fecovita y advirtió que existen causas penales en curso

La tensión entre Fecovita e IBERTE volvió a escalar luego de que la firma eslovaca, junto con el equipo legal de Aisa Group, difundiera una dura respuesta al comunicado emitido por la cooperativa el 3 de diciembre. Según sostienen, el texto de Fecovita contiene "afirmaciones inexactas, omisiones relevantes y distorsiones" sobre el avance real de los procesos judiciales y contractuales que ambas partes mantienen.

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El punto central de la réplica es que la disputa no se limita -como plantea Fecovita- a un desacuerdo comercial en el Tribunal Arbitral de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires. Para IBERTE, "es engañoso afirmar" que la cooperativa actuó correctamente cuando sus principales directivos "están imputados por estafa y falsificación de balances", con causas ya elevadas a juicio y una pericia oficial que detectó "graves irregularidades" en los estados contables de 2021 y 2022.

Uno de los cuestionamientos más fuertes está dirigido a la versión que minimiza el conflicto a un arbitraje. IBERTE advirtió que esa presentación "invisibiliza" que existen investigaciones penales en marcha, confirmadas por el Juzgado de Garantías, la Cámara de Apelaciones y el Tribunal Penal Colegiado. La firma remarcó que el Acuerdo Final firmado el 13 de octubre de 2022, en el que Fecovita reconoce una deuda líquida y exigible por vinos, mostos y documentos de pago, sigue vigente y no fue registrado en los balances de la cooperativa.

Otro eje de la respuesta apunta a la constitución y funcionamiento de EVISA, la sociedad creada en 2021 para exportar vino y mosto. IBERTE afirma que aportó más de USD 31,7 millones y que Fecovita incumplió compromisos esenciales, como entregar la Bodega Resero y abastecer los 2,5 millones de litros mensuales pactados para exportación. "No se trata de ‘desencuentros', sino de un incumplimiento total", señalaron.

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La firma también cuestionó la afirmación de Fecovita sobre supuestas ventas en consignación que IBERTE no habría rendido. Según la documentación presentada, no existe una sola factura emitida a nombre de la empresa europea, ni registros de comisiones o retenciones por consignación. Además, el Acuerdo Final dejó sin efecto cualquier contrato previo de ese tipo, lo que vuelve "falsa", según indican, la acusación difundida por la cooperativa.

IBERTE también respondió a la denuncia de que habría promovido acciones penales "para ahogar" a Fecovita. La empresa sostuvo que las causas penales vigentes no recaen sobre la cooperativa como institución, sino sobre directivos identificados en tres expedientes: estafa, balances falsos 2021-2022 y balances falsos 2023. "Los imputados no han presentado ni una sola prueba a su favor", remarcaron, y señalaron que los pedidos de nulidad fueron rechazados de manera sistemática por los tribunales.

Sobre la solicitud de quiebra presentada en 2022, la compañía explicó que se trató de un recurso previsto por ley ante la falta de pago de la deuda reconocida en 2022. Añadieron que la pericia oficial también detectó que Fecovita omitió informar esos pedidos en sus balances, una irregularidad considerada relevante por la Justicia.

Respecto de la frase del actual presidente de Fecovita, Rubén Panella, quien aseguró que los balances "están realizados correctamente y auditados por una firma de reconocimiento internacional", IBERTE sostuvo que esa declaración "choca de frente con los hechos": la pericia oficial concluyó que los estados contables son falsos, que se simularon aportes y se ocultaron pasivos por unos USD 100 millones. Además, señalaron que ni el INAES ni el organismo provincial aprobaron esos balances.

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Finalmente, IBERTE consideró que la mención a una causa federal por presunto contrabando contra uno de sus directivos busca desviar la atención del cuadro judicial que enfrenta hoy la cúpula de la cooperativa. Aseguraron que ese expediente no tiene relación con el conflicto contractual ni con las investigaciones penales en Mendoza.

Con esta respuesta, la firma europea busca dejar asentado -según afirma- que la controversia supera largamente un diferendo comercial y que los procesos penales en curso comprometen directamente a la dirigencia actual y pasada de Fecovita.