Caputo descartó una flotación libre y aseguró que "Argentina puede crecer al 8% anual"
El ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, volvió a respaldar la política cambiaria del Gobierno y rechazó la posibilidad de avanzar hacia una flotación libre del dólar. En su exposición durante el Ciclo de Conferencias del Centro de Investigaciones para el Desarrollo del Seguro (CIDES), advirtió que "la Argentina es un país muy sensible a cualquier shock, externo o interno, económico o político", lo que -según explicó- vuelve "complicada" una liberalización total del tipo de cambio.
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Caputo argumentó que existen tres razones principales para mantener el actual esquema de bandas. La primera, la alta volatilidad en la demanda de dinero; la segunda, la escasa profundidad del mercado cambiario, ya que "no podés darte el lujo de flotar libremente en un mercado donde, por ejemplo, después de dos horas se operan solo 13 millones de dólares"; y la tercera, la necesidad de una mayor estabilidad política. "Para graduarnos de país serio, necesitamos menos volatilidad política. No puede seguir siendo capitalismo o comunismo", afirmó.
El ministro defendió las bandas como una "forma más previsible de flotar", al permitir que la gente no sufra "sobresaltos". Además, negó que exista atraso cambiario: "Hoy tenemos récord de exportaciones en cantidades, por lo que la moneda no está sobrevaluada".
Durante su presentación, Caputo también se mostró optimista respecto al panorama político y económico tras las elecciones legislativas del 26 de octubre, a las que definió como "un espaldarazo al empresariado muy grande".
Según expresó, el gobierno de Javier Milei atraviesa "un punto de inflexión histórico", en el que confluyen la disciplina macroeconómica, la gobernabilidad y una sociedad mayoritariamente dispuesta a sostener las reformas.
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"El escenario político mejora fuertemente después de las elecciones", celebró Caputo, quien aseguró que en los últimos encuentros con los gobernadores "ellos mismos manifestaron su apoyo a las reformas". El funcionario consideró que ese respaldo será clave para avanzar con los proyectos tributario y laboral, así como con el Presupuesto 2026.
Con tono entusiasta, Caputo aseguró que "Argentina podría crecer tranquilamente al 7% u 8% anual", aunque aclaró que ese potencial solo se concretará si los argentinos "se creen lo que está pasando". A su entender, el país vive "una oportunidad única" después de "más de diez décadas de decadencia", y las urnas confirmaron que "la gente quiere seguir por este camino, aunque sea el más sacrificado".
En ese marco, el titular del Palacio de Hacienda cerró su discurso con una definición que sintetiza su visión del momento económico: "Tenemos orden macroeconómico, respaldo político y confianza social. Si mantenemos estos tres factores, el crecimiento que viene no será una sorpresa, será una consecuencia".