La nueva y macabra hipótesis sobre el triple crimen de Florencio Varela
El caso del triple crimen en Florencio Varela continúa estremeciendo al país y sumando nuevos avances en la investigación. En las últimas horas, Celeste González, una de las mujeres detenidas e inquilina de la vivienda donde fueron asesinadas Brenda Del Castillo, Morena Verri y Lara Gutiérrez, rompió el silencio y su testimonio abrió una nueva hipótesis en la causa.
Según su relato, los responsables del brutal ataque "llamaron a la familia de una de las chicas mientras las estaban torturando", en un intento por recuperar una importante cantidad de droga que habría sido robada.
"Le habían robado a (Víctor) Sotacuro 30 kilos, 300 kilos... después me dijeron 300 kilos. Una de las chicas, con su familia", aseguró González, de acuerdo al fragmento de la conversación que difundió su abogado, Daniel Giaquinta.
Sospechan de una venganza narco
La declaración refuerza la versión de una presunta venganza narco, ya que las víctimas habrían tenido vínculos con un grupo rival.
En este contexto, Magalí Celeste González Guerrero (28) figura entre las nueve personas detenidas por el triple crimen ocurrido el pasado mes en una vivienda del barrio La Rotonda, donde los cuerpos fueron hallados con signos de tortura.
Dos bandas enfrentadas y vínculos con el poder
En su testimonio, González también deslizó que la familia de las víctimas "tenía mucho que ver" y que detrás del crimen habría una disputa entre dos bandas de villas diferentes, con supuestas conexiones con el poder político local.
"Durante la tortura los asesinos realizaron una llamada a los familiares de las jóvenes. Les dijeron que devuelvan lo que le habían robado. Él me iba contando, y a mí la verdad eso me da mucho miedo", declaró la mujer ante la Justicia.