Triple crimen de Florencio Varela: el acusado de cavar el pozo habló ante la Policía

Ariel Giménez relató que fue contratado para realizar un trabajo a cambio de dinero, drogas y regalos, pero la Justicia lo acusa de encubrimiento agravado en el triple homicidio.

Ariel Jeremías Alexis Giménez, de 29 años, quedó en el centro de la investigación por el triple crimen de Florencio Varela tras reconocer que cavó y rellenó el pozo donde fueron hallados los cuerpos de Brenda del Castillo (20), Morena Verdi (20) y Lara Gutiérrez (15). Aunque dio su versión frente a la Policía Bonaerense, decidió guardar silencio cuando fue citado a declarar en la fiscalía.

La macabra revelación sobre el triple crimen narco en Florencio Varela

Según su testimonio inicial, el viernes 19 de septiembre recibió un pedido de una pareja conocida para alquilar un equipo de música destinado a una fiesta en una vivienda ubicada en las calles Chañar y Río Jáchal. Giménez aseguró haber entregado el parlante y haber recibido 30.000 pesos y drogas como pago.

Un día después, relató que lo convocaron nuevamente y, ya en el lugar, le mostraron un pozo en el patio trasero que estaba a medio tapar. "No percibí nada extraño", sostuvo ante los efectivos policiales. Con pala y pico, completó la tarea de rellenarlo y, a cambio, recibió 45.000 pesos en efectivo. Además, contó que le dieron las herramientas como "regalo", las cuales más tarde vendió a un vecino. Para su regreso, la pareja le facilitó un auto de aplicación.

En su declaración también afirmó que sufrió el robo de su teléfono celular el domingo posterior a la desaparición de las tres jóvenes, lo que, según él, le impidió dar mayores precisiones sobre contactos o mensajes de esos días.

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Tras este relato, la Justicia dispuso su detención bajo la imputación de encubrimiento agravado. La causa ya suma nueve personas detenidas. Entre ellas se encuentran Magalí Celeste González Guerrero, Andrés Maximiliano Parra, Iara Daniela Ibarra y Miguel Ángel Villanueva Silva, trasladados al penal de Melchor Romero; Víctor Sotacuro Lázaro, señalado como conductor del vehículo de apoyo; su sobrina Florencia Ibáñez; y los presuntos autores intelectuales Tony Janzen Valverde Victoriano y Matías Agustín Ozorio, arrestados en Perú.

El testimonio de Giménez, cruzado con las pruebas que reúne la fiscalía, podría ser clave para determinar el grado de participación de cada acusado en un crimen que conmociona a todo el país.

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