Alrededor de 1.700 discapacitados asisten a escuelas comunes

La inclusión de chicos con capacidades diferentes a los distintos establecimientos educativos que tiene la provincia es una realidad que desde hace 5 años viene mostrando un avance más que significativo.


 “La integración de los chicos discapacitados a la sociedad es un paso importante porque hay que preparar a nuestra sociedad para la aceptación de estos jóvenes. No todos los colegios están preparados para recibirlos, y esa es nuestra tarea en este momento, prepararlos para que ellos tengan una calidad educativa en cada uno de los lugares en donde les toque estar y compartir con su prójimo y compañeros de tareas”, asegura la directora de Educación Especial, María Santamaría.
El buen rendimiento que han tenido los 1.700 alumnos discapacitados que asisten a las escuelas primarias de enseñanza común de la provincia no hace más que comprobar que la integración es posible. “Un 70% de las instituciones educativas reciben alumnos con capacidades diferentes, y vamos a continuar trabajando para que sea un 100%. Esperemos lograrlo”, argumenta la docente.
La importancia de insertar al los jóvenes con discapacidad es fundamental. Se trata de un cambio en la enseñanza, en el aprendizaje y en el rendimiento de los estudiantes. El mismo debe comenzar por el trabajo de los alumnos de valorar y respetar las diferencias.
 “Lo que uno ve, sobre todo a medida que van creciendo, es que los niños no sólo incluyen al compañero, no solo le aceptan la forma de ser, sino también se sienten contenidos por ellos. Si mi compañero porque es diferente es aceptado, por qué no me van a admitir a mí que soy gordo, que soy flaco, que soy pelirrojo. Es decir, le da el potencial al ser humano de desarrollarse en forma completa, de ser considerado como es, que es algo que necesitamos todos”, explica Santamaría.
“Lo que uno ve de la educación antigua, donde se lo separaba al alumno, es que en la vida adulta dos de cada tres individuos con discapacidad terminaban recluidos en un hospicio o en un lugar apartado, y hoy dos de cada tres personas son incluidas en la sociedad, tienen sus espacios laborales y se desarrollan como individuos completos”, completó.